Cuando el niño cayó rendido, después de derramar su miedo con sus últimas lágrimas, el sauce lo acomodó en una de sus raíces antes de abrigarlo con sus ramas.
Microrrelato escrito por Montse Aguilera (http://letrasparapasarunrato.blogspot.com/)
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi (http://www.dididibujos.blogspot.com/)
(Si tienes un microrrelato con temática ecologista, envíamelo y lo publicaré aquí junto a los otros. ¡Muchas gracias!)
La Tierra, con todos sus elementos, ejerció de madre.
ResponderEliminarBonita colaboración
Un beso, Luisa.
Esos labios de hoja caduca y los ojos de hoja verde me encantan. Es un honor que esta ilustración acompañe mi texto. ¡Gracias Juanlu!
ResponderEliminarY gracias, Luisa, por hacerme un rinconcito en tu blog. Es todo un lujo y un honor. Besos.
No tienes que agradecerme nada. Hice un llamamiento y respondiste, y después lo hizo Juanlu,...Veremos cuanto dura, porque sólo en parte depende de mi, sólo en parte.
ResponderEliminarUn beso, Luisa.
(Y gracias, Tor, por pasarte y dejar tu huella. Verde, en este caso)
Qué bonito, Luisa! No volveré a ver los sauces llorones con los mismos ojos, je, je... Un abrazo
ResponderEliminarMe gusta la ternura que envuelve el relato de Montse, ese árbol que cobija, protector, que tan divinamente ha plasmado Juanlu.
ResponderEliminarFelicidades a los dos.
Un beso a los tres
Tierno hasta deshacerse entre las ramas.
ResponderEliminarBesos suaves.
El dibujo se quedó en un boceto elaborado, haría falta trabajarlo más, pero gracias a todos y todas.
ResponderEliminarEnhorabuena a Mon por saber plasmar la protección de nuestra naturaleza, y a Luisa por seguir sumando micros con esa orientación.
Un abrazo de sauce!
Montse, Juanlu, qué preciosura han sumado!!!
ResponderEliminarGracias por esta recopilación, Luisa
Abrazos
La suma de escritura e ilustración es completísima. Muy enriquecedor!
ResponderEliminarAquí tienes mi pequeña contribución:
ResponderEliminarhttp://microsensatos.blogspot.com/2011/06/vacaciones-2040.html