Aquí, en el presente y a cada instante, cualquiera de las
decisiones que tomamos implica que algunos hilos argumentales acaban por
malograrse. Aquí, en el presente y desde siempre, han muerto, mueren y morirán
versiones y versiones de vidas y ni tan siquiera pestañeamos.
Quizás por
eso aquellos que viven en el futuro nos han contratado para que cometamos sus
asesinatos.
No es tan mal trato como pudiera
parecer, siempre y cuando ellos cumplan y sean el futuro perfecto con el que
todos seguimos soñando.
Mal futuro parece ese que necesita un pasado de sangre. Pero es una historia muy buena e imaginativa, que merecería un desarrollo largo.
ResponderEliminarUn abrazo, Luisa
La cuestión es ponerse de acuerdo sobre qué entiende cada uno como "perfección". Luego de ello podemos continuar con las matanzas habituales.
ResponderEliminarSaludos,
J.