5 de septiembre de 2016

Agua amarga, agua dulce

El día que la mayor parte de los hombres salió para la guerra, dejando detrás tierras y familia, empezó a llover a todas horas, por dentro y por fuera. El valle se cubrió de gris y durante algún tiempo no salió un sol tan grande como para teñirlo de luz, ganándose el nombre de Valle del Agua con el que le conocemos ahora.
Después, porque al final todo pasa, la guerra terminó y trajo, aunque parecía imposible, más agua, la lluvia de la emoción por el retorno de algunos sumándose a las lágrimas por las eternas ausencias.
            Sin embargo en el valle, más verde que nunca, como sin querer, ya se iba imponiendo la vida. En la primera primavera un feriante quedó anclado en un charco y olvidó su camino al caer prendado de una de las mozas casaderas; y un año después el mismo hombre, con el nacimiento de su primer hijo, hizo una nube de azúcar tan grande que cubrió el Valle trocando las lágrimas en risas.
            Muchos años han pasado y la historia no se olvida, pero la vida no duele tanto y a veces, entre arroyos, juega.


(microrrelatos escrito para el V Concurso de Microrrelato Leonardo Barriada)

12 comentarios:

  1. La vida siempre se impone, a pesar de todas las desesperanzas.
    Besos.

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  2. Así es, aun cuando uno desespere esperando.
    Gracias, Alfred, por la visita y el comentario.

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  3. Siempre aparece alguien que hace una nube de azúcar, y es posible el retorno de la alegría...
    Yo pondría "dejando atrás tierras y familia", pero es sólo un detalle...

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  4. Me he pensado tu "detalle", gracias por decirlo. Sin embargo no acabo de ver la diferencia. ¿Estaré equivocada?
    Gracias, Hugo

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  5. Me parece que tiene algo más de fluidez, "DEjando DEtrás" ..."dejandoatrás"...

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  6. Mientras exista alguien que deja de ser trashumante a causa del corazón, capaz de repartir felicidad con forma de nube, se podrá pensar que, tras la lluvia, siempre escampa. Una lectura muy agradable y esperanzadora, Luisa
    Un abrazo

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  7. Muy hermoso. El "comenzó a llover por dentro y por fuera" me parece maravillosa frase.

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    1. Gracias, Migual Ángel. Otra vez de vuelta y con la suerte de que estáis aquí. Gracias.

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  8. Precioso Luisa, un cuento lleno de emociones, al fin, el agua siempre simboliza la emoción. La vida siempre gana...

    Besos.

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    1. Hola, Yashira. Hay muchas cosas que nos unen al agua y el agua es vida, o sea todo. Puf, y nada más. Gracias!!

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