31 de mayo de 2013

Chinarse

           Agobiarse, aburrirse, amargarse. / A modo de protesta y para lograr unos objetivos, rajarse la carne con un objeto cortante pudiendo llegarse a cortarse las venas, aunque no es preciso.  / En lenguaje choni, mosquearse, enfadarse.
            He aquí una palabra mucho más extendida y con más acepciones de las que yo hubiese podido imaginar. Cabe la posibilidad de que tú, como yo, no la conocieses o no la hayas oído nunca; pero con esta entrada vamos a llenar ese vacío: tenemos sus definiciones y, quién da más, un lugar en el que nos enseñan a conjugar el verbo, esta página, aunque hay otras.
            Ejemplo: “Me está chinando tanto mi madre con los estudios y las notas, que estoy por chinarme las venas con el cuchillo del pan”. / “No te chines con el Jonathan, que lo está pasando mu mal con lo de la Jesy”.

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30 de mayo de 2013

Fobia a las publicaciones



El microrrelato “Una inoportuna fobia”, publicado ya aquí, ha sido incluido en el nuevo número de la revista digital miNatura, al cual podrás acceder a través de la imagen.

28 de mayo de 2013

Habilidad acrobática

Harto de que le quitasen el mérito que creía merecerse, el trapecio modificó levemente su vuelo e impidió que las manos de aquel interesado saltimbanqui lo alcanzasen en ese estúpido triple salto mortal de todas las tardes.

27 de mayo de 2013

El mensaje


           Este año hemos decidido pasar las vacaciones en la montaña y cuando me levantaba por las mañanas, si madrugaba me iba a caminar por los alrededores de la cabaña que habíamos alquilado y conseguía despertarme del todo oliendo la retama, el tomillo, las jaras, junto a los trinos de los gorriones, los vuelos bajos de las golondrinas que llegaron a tocarme en ocasiones el pelo y el sonido del agua de las fuentes y más adelante, del río que a lo largo de su camino, salta, juega, se esconde y vuelve a saltar. Cuando llegaba a su altura, me gustaba sentarme a la vera e incluso meter los pies y refrescarme por un ratito, mientras descansaba apoyada en una roca o en el tronco de un árbol.
            El día que recuerdo con mayor cariño, fue cuando como casi todos los días, me senté a descansar con los pies metidos en el agua y fue a tropezar en mi pierna una botella que incluso me hizo algo de daño, ¡gracias a que no era de cristal porque se hubiera roto o incluso me hubiera herido! Era una botella de las que se usan para los refrescos de dos litros y aunque estaba aparentemente vacía, el impacto por la velocidad en mi pierna, fue algo, algo más bien sorprendente aunque el roce produjo un impacto que me dolió un ratito. Pude reaccionar a tiempo para agarrarla, que no se escapara y siguiera su curso. Seguramente la persona que la puso dentro del cauce, pretendía que llegara a la desembocadura y fuera encontrada en cualquier playa, pero hete aquí, que tropezó en mi pierna y fue agarrada por mis cinco dedos de la mano izquierda. Cuando la tuve delante de mis ojos, pude con gran asombro descubrir que dentro había enrollado un papel ceñido con una goma para evitar que dejara de ser un rollo y descubriera lo que en su interior se escondía. Abrí la botella y con cierto trabajo, conseguí extraer el rollo de papel al que con enorme curiosidad quité la goma y desenrollé encontrando el siguiente texto escrito: “Esto que estás leyendo lo ha escrito un ser pequeñito y habitante del bosque donde nace el río, porque aunque te extrañe, en el bosque vivimos unos seres diminutos que velamos por los humanos y su entorno, aunque ya los humanos se dedican a destrozar la naturaleza y vamos a tener que salir de los lugares donde llevamos viviendo infinidad de siglos. Me duele que a mis 500 años deba ir a vivir a otro lugar si no nos queman antes o arrancan los árboles milenarios que son lo que nos cobijan y nos dan sombra, nos protegen y nos dan alimento. Me da pena porque los humanos no saben o no quieren saber que nosotros velamos por su bien estar, hace mucho tiempo que quisieron desentenderse y las nuevas generaciones ni siquiera saben que existimos pero que si dejáramos de hacerlo, las hojas de los árboles estarían sucias y los árboles se morirían. Nosotros nos deslizamos para limpiar las hojas y ellas aspiran mejor el aire que necesitan, otros dejamos caer las hojas viejas que sirven de abono y de refugio a nuestras moradas, etc., etc. Esta misma botella que utilizo, es para decirte que no debéis dejarlas tiradas en cualquier sitio y menos, en los bosques que a veces en vez de ser el pulmón de las ciudades, se convierte en un basurero donde será imposible vivir. De seguir así, contaminará nuestras vidas y seguido las vuestras, por eso hemos recogido todas las que hemos podido y os hemos mandado el mismo mensaje. Esperamos que algunos seáis en esta ocasión tan curiosos como imagino has sido tú y deseo cuentes esta historia a tus hijos, sobrinos, nietos y amigos, porque así todos sabréis que habrá que hacer para que nuestros bosque brillen y respiren como es debido, ya sabes que en ello está que gocemos de buena salud o seamos tan necios de mandar todo al garete".

Relato escrito por Nani Canovaca

26 de mayo de 2013

PFD: Hugo (25) y Yashira (7)

Y hoy… ¿un duelo? No, una pareja de amigos que ven en la misma imagen historias bien distintas.

fotografía hecha por Jose Luis Rafael

¿De hojalata o de latón?
En ti reconocí la emoción desde el primer día que nos vimos. Pero te fuiste vistiendo, añadiendo capas. Un día descubrí que a mi lado sólo había un montón de dura chapa, lloré y supliqué, ahí no había nada. Me planté de frente, te miré, acercando mis dedos a tu dura y fría piel me marché.
Yashira (blog: Te cuento…)

-Ya lo sé, ya lo sé... me lo has dicho varias veces: debo perfeccionar el mecanismo de mi máquina del tiempo antes de arriesgarme a utilizarla. Por suerte, el proceso ha sido reversible, pero hace un momento tenía la cabeza en el siglo XII y el cuerpo en el siglo XX.

25 de mayo de 2013

PFD y Hugo (22, 23 y 24)

Todos los textos son de Hugo (blog: De musas y otros  cuentos). Todas las fotos, de Jose Luis Rafael. Hay que admitir que no hacen mala pareja.


La Civilización Amarilla ha sucumbido. No fueron capaces de prevenir el desastre, se enredaron en su propia tecnología, y cuando quisieron reaccionar ya era tarde. Sólo quedan despojos.
Pero nosotros, los Naranjas, tuvimos una reserva de energía y de inteligencia que nos permitió resistir. No ha sido fácil, hemos tenido nuestras bajas, pero indudablemente, los que quedamos en pie resurgiremos de entre los escombros, para dar vida y fuerza a una raza fortalecida, nueva, invencible.
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Te elevas desde tu bondad, desde tu mansedumbre. Te paras allí, frente a ellos, y les muestras, en el fondo de tus blancas manos, toda la paz que ansía el mundo.
Te responden, desde la sordera de la ambición y la injusticia, con una ráfaga de ametralladora.
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Aquella tarde soleada me esperabas radiante, al otro lado del puente. Corrí, volé a tu encuentro, con los brazos tan abiertos que podría abarcar el mundo entero. Luego vinieron cuarenta años de vida compartida, los hijos, los nietos; momentos inolvidables y tragos amargos; sonrisas, llantos y abrazos apretados, en silencio.
Queda muy poco de todo aquello. Te fuiste, quién sabe a qué mundos, ya hace tres años. Los hijos buscaron sus caminos, y los nietos vienen de vez en cuando.
Este puente es mucho más pequeño, pero cruzarlo puede ser una odisea. Mis ojos cansados adivinan, más que ven, las tablas que faltan. Mi bastón puede atorarse en uno de esos huecos. Prefiero quedarme aquí, ya vendrá alguien a ayudarme. No tengo prisa. Nadie me espera al otro lado.

24 de mayo de 2013

Chinchorro

Juego de naipes en el que cada jugador debe agrupar sus siete cartas en tríos, cuartetos o escaleras; de modo que se habla de “hacer chinchorro” cuando se logra hacer una escalera con siete cartas del mismo palo. Chinchón.
Este significado de la palabra chinchorro no aparece en el Diccionario pero, por una vez y sin que sirva de precedente, voy a perdonar (sólo en parte) la omisión; y es que he visto cómo, en cuestión de juegos, nombres de juegos y reglas de los mismos, pueden producirse importantes variaciones incluso de familia a familia.
En cambio chinchón sí aparece, con esa acepción y con otra mucho más común: “bulto o hinchazón que sale en la cabeza como consecuencia de un golpe”.
Así pues hay que tener cuidado en una cosa. No es lo mismo “hacer chinchorro o chinchón” que “hacerse un chinchón”, lo primero puede generar cierta satisfacción y lo último sólo lo hará en el caso de que se sea masoquista.
Ah, y para encontrar la información más completa en relación con esta palabra, incluida la acepción de juego de la que yo hablo, sólo hay que irse a la Wikipedia, que a veces parece estar en todo.
Ejemplo: “¿Qué cómo me he hecho el chinchón? La culpa es de Paco y su mal perder, me arreó cuando le gané al chinchón, una partida de chinchorro en el que me quedé con no pocas perras suyas”.

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22 de mayo de 2013

Robinson

          Llevaban unos cuarenta años juntos y, ahora que ella se había ido para no volver, empezaba a pensar que toda una vida no había sido tiempo suficiente.
De un día para otro se sintió como Robinson, arrojado en la playa, muerto de hambre y frío, a merced de las inclemencias del tiempo, lejos de las personas que amaba y  con una absurda obligación por cumplir: volver a tomar las riendas de su vida, empezar desde cero con lo poco que tenía, limpiar las cuatro paredes que le protegían y mantener una tonta llama encendida por razones que no comprendía. Pero, al contrario que el famoso náufrago, el cual construyó un hogar en una isla, él empeño todo su tiempo en transformar su casa en un lugar inaccesible para todo aquel que no fuera él mismo, ella o los momentos que habían vivido juntos.
Muy pronto se sintió incapaz de destruir las huellas de los pasos que ella había tejido, año tras año, recorriendo las habitaciones que conformaban su hogar, por eso hizo del pequeño huerto sus dominios. Y alejado de la casa, hora tras hora, día tras día, los recuerdos empezaron a hacerle menos daño aunque la espalda le doliese siempre. Bajó los ojos, dejó de mirar el cielo y ya no quiso volver a soñar. Empezó a comer sólo lo que cultivaba y aumentó su aislamiento, el que buscaba sin cesar; permitió que el pelo y la barba le creciesen, que las ropas se manchasen y rompiesen, que sus labios se secasen y cerrasen, que el mundo se olvidase de él y él logró ignorarlo.
¿Cuánto tiempo pasó así? ¿Cuánto tiempo podría pasar de ese modo? Afortunadamente, la vida quita y da. En ocasiones, sus olas se llevan a alguien querido; en otras, deja extraños objetos en la playa, una pelota, por ejemplo.
Un día como cualquier otro, un balón saltó la tapia y tras él llegó un niño, con las mejillas coloradas, los ojos llenos de curiosidad y una sonrisa.
-¿Por qué no estás en la escuela, pequeño? -dijo Robinson-. Hoy es viernes.

21 de mayo de 2013

PFD y Andrea (1 y 2)

            Andrea (blog: La fábrica de relatos) dejó dos micros en PFD. ¿Y pensar que yo no la conocía?
            No hay mal que por bien no venga.
           
fotografía hecha por Jose Luis Rafael
            Exhiben resignadas su fragilidad y perfección. Soportan flashes insistentes, dedos acusadores y miradas indecentes. Tiemblan imperceptiblemente al llamar la atención de algún comprador dispuesto y se alegran con crueldad si es otra la elegida. Cuando baja la persiana suspiran aliviadas celebrando en silencio su buena ventura.”
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fotografía hecha por Jose Luis Rafael
              “Posa un dedo en su mejilla. “Esta es por tu padre, porque a veces me cabreaba. Estas dos, por todos los besos que le daba al perdonarle. Las de aquí, son de aquel tiempo en que reía tanto. Esta es de tristeza por la muerte de mi abuelo.”Sonríe ufana y los surcos se subrayan. “Cada arruga, cada grieta, es un momento de mi vida. Todas juntas son mi historia”

20 de mayo de 2013

5 sentidos



Durante el trayecto aspiré profundo su exquisito aroma, saboreé su sal cuando la brisa tocaba mi rostro, oteé su horizonte en busca de algún monstruo mítico, afiné el oído para escuchar el canto de sus sirenas y acaricié su superficie para crear un nexo pero no, nada funcionó; el majestuoso Mar Caribe no quiso develarme sus secretos.

Microrrelato escrito por Miguel Díaz Mirón
Ilustración hecha por Amparo Martínez Alonso

18 de mayo de 2013

DeAntología, la logia del microrrelato

Una editorial: Talentura Libros
Dos antólogos: Rosana Alonso y Manu Espada.
69 antologados y 138 microrrelatos inéditos.
Aquí tienes sus rostros, para que te vayan sonando.


O mejor, entra en esta página. Descubre qué es “DeAntología”, eso de lo que todo el mundo habla.
Sí, es un libro. Ésta es su portada.


Y éste su booktrailer.

Lo cierto es que nunca he sido muy de clubs pero… pertenecer a esta logia, ser uno de esos autores, estar codo con codo con escritores que admiro tanto, hacen que esté sencillamente encantada.
Gracias.

17 de mayo de 2013

Manual de instrucciones

No sea cagaprisas, por favor, y lea el folleto que tiene en sus manos.
El aparato que ha adquirido no es un testel, menos aún para alguien con una miaja de inteligencia; y si no tiene cuidado y no sigue las instrucciones, se arriesga a descuajeringarlo, a escogorciarlo incluso; de modo que lea, por favor, lea. Ni usted ni yo queremos arriesgarnos a que se haga un carajal con los diferentes usos y utilidades que tienen sus piezas.
El chisme que tiene en sus manos no funciona por arte de birlibirloque, hay que hacer que carrule, hay que tratarle abonico y ahora, con los tiempos que corren, hay que hacer que condure. Nada más y nada menos.
Le digo, eso sí, antes de nada, que si deja de petar por su culpa, porque no ha querido leer estas letras, no valdrá para nada que se emperejile en que yo le haga una ñapa de cualquier manera. No. Le adelanto que en ese caso la compañía que represento, y yo mismo, le mandaremos sin dilación a la mierda.

16 de mayo de 2013

El increíble hombre menguante




Elegimos por votación a un presidente tridimensional, con una cierta capacidad para repetir algún que otro discurso. Poco después nos pareció que sus palabras estaban huecas y más tarde empezó a quedarse mudo. Hace no mucho, con cierto estupor, vimos que había perdido una dimensión, que sólo nos era posible oírle o verle en una pantalla de plasma.
Algunos son optimistas, dicen que el proceso es rápido e irreversible. En cuanto a los pesimistas, tan grande y profunda es la sensación de que alguien está haciendo el ridículo que algunos ya han empezado a reírse.

15 de mayo de 2013

Talla XL

            Tu ausencia ha dejado un vacío tan inmenso que ahora, lamentablemente, me vienen grandes desde los armarios hasta todos los planes que soñamos juntos.

14 de mayo de 2013

PFD y Pilar (1)

          Tras un duelo amistoso, ¿estamos ahora frente al tercero en discordia? No, en absoluto, se trata de Pilar (blog: Observando la vida) quien, en la sombra de la imagen, vio más la oruga que la mariposa.
          
fotografía de Jose Luis Rafael
            “Se negaba a mirar la silueta de su sombra, siempre pegada a ella, recordándole su pasado. Ella era una preciosa mariposa, sus maravillosas alas así lo confirmaban  y sus colores con aquel brillo de polvo dorado, le aportaban un toque de distinción y belleza.”

13 de mayo de 2013

El sobre


 
            Había plantado árboles en el jardín que rodeaba la gran mole de edificios donde vivía. Ella junto con todos los niños y sus padres habían solicitado árboles a la Junta Municipal. Los arboles crecieron a la par que ellos. Un día, como un juego escribieron sobre un azulejo sus nombres y lo enterraron junto a las raíces. Cada uno sabía cuál era el suyo. Los cuidaban, regaban y mimaban jugando a su alrededor sin dañarlos. Embelesados seguían el desarrollo de aquellos seres vivos del mundo vegetal, como si se tratara de algo extraordinario. Estaban orgullosos de su proeza contemplando el milagro del entorno. Esto ocurrió hace ya bastantes años.
            Cuando hoy Marina, se dirigió al mostrador de la oficina de Correos para enviar un libro a una amiga, pidió un sobre verde. “Con la compra de estos sobres estás salvando árboles” Lee en la solapa. Son caros los sobres, pero no se lo pensó dos veces. Mientras esperaba su turno observando el indicador de letras rojas fosforescentes con sonido metálico que rompe el silencio del patio de operaciones de la oficina, recordó aquellos árboles que se quedaron en el jardín de la casa de su infancia. Algún día volverá a ver cómo han crecido –se dijo- para sí. Porque su apego por la tierra y el medio ambiente, no se quedó solo en aquel acontecimiento que pudo parecer un juego de niños.

Microrrelato escrito por Cabopá
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi

12 de mayo de 2013

PFD Y Ponfiel (15, 16, 17, 18, 19 y 20)

¿Debí deciros ayer que Ponfiel (blog: Cirujano de letras) iba a estar aquí también hoy o preferís las sorpresas? Aunque si hablamos de sorpresas, yo os gano; él me mandó diez micros nada más y nada menos; ahora decidme, si tenéis valor, que eso no es una sorpresa y de las buenas.

            Título: Mejor a solas
            Tú y yo habíamos emergido en medio del mar. Fuimos navegantes en la cresta de las olas,  hasta que ella apareció de súbito. Nadie lo pudo remediar. Su canto te sedujo. Al fin soy libre.
            Título: A la deriva
            Si nos dejamos llevar por la monotonía de los días acabaremos varados como el iceberg que tenemos delante, y a remolque de un barco que apenas puede tirar. Dejémonos seducir por el encuentro espontáneo de la vida, antes que el iceberg se deshaga.


            Título: De armas tomar
            Las chicas se detuvieron ante los relojes para mirar la hora, llegando la confusión. Cada reloj marcaba una distinta. Se miraron unas a otras, con ojos desorbitados hasta que una de ellas dijo: “ni los oráculos funcionan correctamente”. La vida te da sorpresas. Y volvieron a sus poses de modelo.
            Título: Fatídica hora
            Al ver las doce en punto el mundo se les cayó encima. Esta vez no llegaron a tiempo. Mañana seguirán siendo desgraciadas.


            Título: La misma historia
            Los flashes de las cámaras inundan el escenario. Los actores se sienten alagados, por los aplausos, las oblaciones y el buen trato que los medios de comunicación les dan. Todo un mundo mágico se desplega, hasta que de puertas hacia adentro la historia vuelve a repetirse.
            Título: Duelo
            Dispuse cada una de las cámaras paralelamente, sin que apenas hubiera distancia entre ellas, de forma escalonada, para que, una vez posara, quedar inmortalizado. El problema vino después, cuando quise revelar los negativos, y ni yo mismo supe identificarme. Desde entonces deambulo por el mundo, a expensas de que alguna cámara me retrate como realmente soy.

(todas las fotos son de Jose Luis Rafael)

11 de mayo de 2013

PFD Y Ponfiel (11, 12, 13 y 14)


Ponfiel (blog: Cirujano de letras) dice que está ocupado y lo cierto es que no me cuesta nada creerle o… quizás sí, aunque sólo un poco.


            Título: Estado de ánimo
            Una escena perfecta, para un lugar perfecto. Cielo azul, ramas desprovistas de hojas que impidan que el sol llegue hasta nosotros, y un frío día de esos de invierno, que nos penetra calándose hasta los huesos. La única diferencia con el día de ayer, es que hoy no he visto el cielo gris, pero tu mirada me sigue enervando.
            Título: Romper el hielo
          La inmutabilidad de la cosas me hace pensar que este mismo paisaje lo he disfrutado hace varios años, y que a ti te conozco de toda la vida. Que tu perro tiene el mismo comportamiento de siempre. Que la nevera siempre está vacía. Que tú, como siempre, acabarás dándome un beso en la frente y me desearás buenas noches. Que soy tu fragancia, y que eso, que me quedo como siempre, a expensas de mi príncipe azul como este cielo.


            Título: Invasión
            De vuelo grácil y aparentemente inofensiva la mariposa se posa sobre la mano de un hombre que toma el sol. Al sentir el cosquilleo de sus patas, levanta la cabeza, y observa con detenimiento al insecto. Saca la cámara de fotos de su bolsillo derecho, con precaución para no asustarla, y justo en el momento en el que va a darle al botón, la mariposa posa con galantería, saca su aguijón y le da una punzada en la piel. El dolor le hace soltar la cámara que vuela por los aires, lanzando varias fotografías que captan su metamorfosis emprendiendo el vuelo. Al caer al suelo, un hombre de similar edad y semidesnudo, levanta la cabeza y ve sobrevolar una grácil mariposa. Grita desesperado intentando darle con la mano, apartándola de su lado. No lo consigue, ella le busca, se posa en su cabeza y le pincha con  el aguijón. Todo un ciclo que continua hasta que uno de ellos se da cuenta que la película siempre se repite en la misma escena. La inconsciencia le ha mantenido al margen, ahora libre y sabiendo su fin, los dos vuelan en busca de nuevas fronteras. La nueva y sutil invasión extraterrestre ya ha comenzado.


            Título: Disfraz
            Nos cruzamos en la misma esquina de hace dos días. Recuerdo era un miércoles, diecinueve, a las diecinueve horas. El sol radiante brillaba espléndido. Tus ojos relucían igual. Esa mirada penetrante me llamó la atención. Me deshice por dentro, a la vez que me enviabas una sonrisa. Y es la decimonovena vez que me topo con lo mismo ¿Quién hubiese jurado que eras un lobo disfrazado de cordero?

(todas las fotos son de Jose Luis Rafael)

10 de mayo de 2013

Noticias rosas


Primero dijo que le refanfinflaba, que yo era un cagaprisas; pero no mucho después, se dio cuenta de que la ceremonia de los Oscar’s estaba a la vuelta de la esquina. Empezó con que quería petarlo, con que llevaría un síguemepollo de antología; yo, por mi parte, le dije un par de veces que se iba a quedar como un chupitel, que quizás se estaba pasando un poco, que una miaja de tela no era un vestido y que no lo iba a ser nunca, que con esos tacones se iba a esmorroñar en la alfombra roja, que no era cuestión de llamar la atención sólo por ir corita.
Al final, como todos habéis podido ver, no ha venido; la he dejado arregomitando en casa, vencida por un corte de digestión provocado por una simple corriente de aire, sí, tan inevitable como inoportuna.

9 de mayo de 2013

Monstruos

A fuerza de dominar sus sueños y hacer que el miedo perlase su frente, creyeron que el siguiente paso sería entrar en la realidad a través de los gritos de aquel que les soñaba.
Se equivocaron. Ahora, armado de locura, no hay nadie más valiente.

8 de mayo de 2013

PFD y Hugo (21)

Estuve fuera y no pude comentar a tiempo este texto que Hugo (blog: De musas y otros  cuentos) dejó en PFD, del cual me gusta especialmente esa manera elegante en que sitúa el horizonte a poco más de un brazo de distancia.
fotografía hecha por Jose Luis Rafael

“Puedo ver la tormenta en el horizonte, a través de tus cabellos, como cuando giro en nuestra cama, y miro hacia tu lado. Sé que discutiremos, y que algo se quebrará, y que el amor huirá, sigiloso. Y cada vez, tardará más en volver.”

7 de mayo de 2013

Primavera

El microrrelato “Objetivo común”, uno de los microrrelatos ecologistas de mi cosecha, ha sido publicado en el último número de la revista digital Pseudònims, el tema era: “primavera”.
Por otro lado, y desde ya, la publicación acepta textos en torno al siguiente tema: “mudanza“.

6 de mayo de 2013

Paisaje

Si el planeta estaba cubierto de hormigón, ¿por qué lo llamaban Tierra?

4 de mayo de 2013

Hugo (20) y Rosy (5) en PFD

Duelo amistoso de dos amigos, toma y daca. ¿Alguien da más? Se aceptan más historias.
fotografía hecha por Jose Luis Rafael, la mano es mía

“¿Que no le encuentras sentido a tu vida? Observa tu piel. En ella van quedando las señales del paso del tiempo, de los cambios en tu vida. ¿Verdad que no tienes la misma piel que hace diez años, o veinte? Siempre es posible la transformación. Fíjate en mi, hace un par de horas era un gusano encerrado en un capullo... “
Hugo

“Miraba altanera, buscando donde reposar sus ya débiles alas. En su corta existencia, le dio tiempo a saborear miles de flores, recorrer miles de kilómetros y perpetuar su especie. Había oído de unos seres que a pesar de vivir muchos años, se quejaban constantemente de que la vida era muy breve. No le extrañaba esta actitud, sabía que eran unos extravagantes que perdían el tiempo en guerras, atesorando fortunas, incluso muchos de ellos, pretendían volver a la naturaleza, pero no a pie.”
Rosy Val

3 de mayo de 2013

Cagaprisas

Persona impaciente e inquieta, que actúa demasiado rápido y hace todo corriendo. Persona ansiosa que siempre tiene prisa o que mete prisa a los demás.
No hay que añadir mucho más esta vez: la definición habla por sí misma, la palabra es suficientemente gráfica. Sólo aclarar un pequeño detalle: la misma palabra, invariable, se usa para el singular y el plural.
Ejemplo: “No seáis cagaprisas y sentaros, tenemos tiempo de sobra”.

(quizás quieras participar en todo esto, mira cómo)

2 de mayo de 2013

Herencia



ilustración de Fernando Martínez

Al llegar a casa, la había descubierto haciendo precipitadamente las maletas. Y minutos después, sin aún poder creérselo, oía un portazo.
Ahora vagaba por el que había sido su apartamento, buscando respuestas, haciendo conjeturas, perdido. No habían discutido, estaba seguro de que no había terceras personas, no recordaba un comentario hiriente o un mal gesto. Sabía que, hasta el último instante, habían sido felices; y, sin embargo, ella se había ido, ¿por qué? Repasó con el mismo celo la casa y sus recuerdos, y lo único que encontró fue un número anotado en el bloc que había junto al teléfono.
Más o menos media hora después de que ella le hubiese abandonado, él se apagó hasta morirse.
Nunca supo la verdad, a seres como él nunca se les decía lo que eran; pero ella había sospechado, había investigado y había encontrado una respuesta: esa cifra tan alta y tan corta, los segundos que le quedaban de vida, y el regusto amargo y metálico de unos besos que quizás no lo habían sido nunca.
Mucho más tarde, alguien quiso que aquel juguete fuese un ser humano de nuevo y volvió a poner el reloj de la vida en marcha; así nació un robot que siempre se  creyó hombre, con una extraña afección ocular a causa del óxido.

(microrrelato escrito para participar en el concurso convocado por ENTC, del mes de marzo y que debía de estar relacionado, de algún modo, con la cifra “2084”)