30 de marzo de 2015

La huida

Habían sido años de oscuridad y de inactividad, encerrado entre dos paredes, viviendo una vida para la cual no había sido imaginado.
Salió de entre las páginas del libro, se dirigió hacia el borde de la estantería, un acantilado, y la visión de los cientos de libros apilados, llenando todo el espacio visible, lo paralizó.
Se puso a pensar durante un momento. Quizás no en todos ellos había vida, quizás fuese más difícil de lo que había creído; pero enseguida supo que no podría seguir esperando.
Miró un momento hacia atrás. Vio como su eterno enemigo se acercaba a la que había sido su novia desde hacía años, el muy miserable, y, tras leer el título del primer libro que estaba a su derecha, se zambulló entre sus páginas.

5 comentarios:

  1. Qué bueno, Luisa! Escapar del propio destino, nunca fue tan fácil!
    Besos

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  2. ¿Dónde habrá ido a parar? Eso da para otro microrrelato, eso sin hablar de la historia despojada de uno de sus protagonistas que ha dejado detrás.
    Puf, un lio

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  3. Luisa, a veces una huida a tiempo es una victoria segura. En este caso tu personaje, el protagonista de esa novela, consigue escapar y a ver cómo se desenvuelve en ese otro título.

    Me gustan los juegos metaliterarios, son muy agradecidos.

    Abrazos.

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  4. Me encanta esta transmutación de personaje literario a persona en vida que escapa de su imaginario (que curiosamente no fue creado para él) y quiere dar ese salto al vacío. Y acaba regresando a las páginas de un libro de vida ¡quién sabe si enamorado o deseando salir de esa vida que tampoco fue creada para él!

    Muy buena idea, ¡buenísima!
    un besazo y únicamente .... no repetería la palabra: "imaginado"....

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  5. Gracias por el comentario, que he seguido.
    Espeero que esté mejor así.

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