Este
año por fin me atreví y fundí dos deseos en uno: embarcarme en La nave de los locos e
ir a Tokio.
¿Cómo lo logré? Respondiendo a la
propuesta de Fernando Valls.
Mis impresiones por el viaje que
quizás no haga nunca las podéis encontrar allí, en La
nave. No había un lugar mejor donde dejarlas, no hay un lugar mejor
donde leerlas.
Voy para allá. Enhorabuena Luisa!!!
ResponderEliminarBesos desde el aire