21 de diciembre de 2015

Crueles

Desde este rincón he sido testigo mudo de sus vidas pero hace demasiado tiempo que la casa está vacía.
Recuerdo que me propusieron jugar al escondite, como avergonzados, mientras se daban codazos entre guiños y risas.

4 comentarios:

  1. Relato terrorífico donde los haya.

    Abrazos nevados.

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  2. Buen micro, impregnado todo de angustia y crueldad...

    Saludos

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  3. El escondite era un juego cruel, siempre lo viví así. Odiaba cuando tenía que jugarlo.
    Y de ahí....

    Gracias por la visita y Feliz Navidad!!

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