Telégrafo
Habíamos establecido una concordancia similar a la
utilizada en el Telégrafo. Yo era un punto. Tú lo eras seguido. Tú un tachón,
yo dos. Y así hacíamos filas y filas, hasta que el punto fue aparte. No hubo
forma de reconciliación. Ahora somos simples mudos en un empedrado que quizás
mañana nos acabe enseñando que solo hacíamos que tropezar en la misma piedra.
Vidas encerradas
La elevada consistencia de las piedras le hicieron ver
pasar miles de historias cual más cruel. Después de los años y apenas
desgastadas alzan su voz porque nos quieren contar lo equivocados que estamos,
mientras el hombre sigue pisándolas sin escrúpulos, como objetos inanimados.
Industria
La industria lítica se ha revolucionado desde el
momento en el que en vez de darse palos unos a otros han comprobado tras miles
de pruebas, que hay armas más eficaces como el empedrado. Hay quien se dedica a
buscar víctimas para empedrarlas y dar un auge a la industria, los mismos que
se enriquecen. Es la única forma de salir de la crisis.
Texto: Ponfiel (blog: Cirujano de letras)
Fotografía hecha por
Jose Luis Rafael (publicada en Palabras, fotos, días)
Difícil esta foto. Bueno no quiero repetirme. Gracias por este espacio.
ResponderEliminarYo veo la foto y pienso... Irlanda, fantástico lugar, fantásticas gentes.
ResponderEliminarGracias por las palabras