Este
se va a enterar de lo que vale un peine, va a sacar la cartera, a comprarme
media tienda y arreglarme el mes, como que me llamo Maruja y tengo que llevar
comida a casa.
Había
leído que debía estar motivada, vencer al desánimo y estar dispuesta a todo; y
ella lo estaba.
A
continuación, mientras él cotilleaba en el muestrario de botones, fue a cerrar
disimuladamente la tienda con llave; siendo más tarde, cuando se volvió para
atenderle con una sonrisa en los labios, cuando descubrió una navaja en sus
manos.
Uff un micro letal. Y con mucho fondo a la imaginación más macabra.
ResponderEliminarEl cazador cazado.Muy bueno, y el título muy irónico.
ResponderEliminarMuy letal el micro, tal y como dice Miguel Ángel. Veo que sigues en forma ¡anímate con el REC Luisa! que tienes mucho que decir y si te llamaran me alegraría mucho.
ResponderEliminarBesazo desde este lugar en el norte con más frío que calor. :)