Le hubiese gustado haber pasado su
niñez jugando en la playa y vivir un primer amor, pero en su piel sólo pudo
encontrar el sabor amargo del llanto eterno.
A fuerza de desventuras, su alma se tornó oscura y
inició el viaje en el que las olas se acercaban a lamer su piel de color brea,
en el que ni cantó ni disfrutó de los atardeceres rojos, hasta que llegó la
parca para empujar la patera hacia el temporal y enterrarles junto a muchos
otros, entre la playa y el cielo, en el Mediterráneo.
(microrrelato
escrito para el concurso de Relatos
con Banda Sonora de la Cadena Ser, basándome en el tema “Mediterráneo” de Serrat, y
enviado más tarde a Esta
noche te cuento, propuesta del mes de agosto: Azul… marino)
Le eché mucho morro a esto. No escribí casi nada, como podéis ver, removí las palabras de la canción un poco y... ¡lo presenté a dos concursos!
ResponderEliminarQué osada, qué caradura.
Te daré la razón Luisa, en cuanto al reciclaje de los versos de Serrat y su aprovechamiento. ;-)
ResponderEliminarAhora bien, me parece genial cómo lo has hecho; porque -al fin y al cabo- has presentado una pieza completa, redonda.
Un abrazo,
Sí, mucho morro, pero con brisa marina que es una delicia.
ResponderEliminarAbrazos con canción incluida.
Bueno, en este caso el reciclaje encajaba en el tema del mes. Y el micro merece ser leído, el tema que trata es importante.
ResponderEliminarBesitos