Sólo una vez al año revelan cuánta
belleza tenían guardada. Van floreciendo en respetuoso orden, para que podamos
admirarlos. En este momento están en llamas los flamboyanes. Y entonces
descubro, con tristeza, que llegó a su fin la primavera y que, enfrascada vaya
a saber en qué terrena complicación, no disfruté como Dios manda del blanco
fugaz de los ciruelos, del rosa de los lapachos, del lila de los jacarandás.
Microrrelato escrito por
Mónica Brasca
(http://monicabrasca.blogspot.com.ar )
(http://monicabrasca.blogspot.com.ar )
Ilustración hecha por
Valentina Novero
(http://www.flickr.com/photos/vnovero/ )
(http://www.flickr.com/photos/vnovero/ )
(Si tienes un microrrelato con temática
ecologista, no dudes en enviármelo. Si, por el contrario, prefieres ilustrar,
ponte en contacto conmigo, esta sección la estamos construyendo entre todos y
estás invitado. ¡Muchas gracias!)
Hay que estar atentos, la primavera ya se acerca y sería imperdonable no detenernos a observarla.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho el relato, así como la ilustración.
Abrazos.
Sí, es un "pecado" muy frecuente el no saber apreciar las bendiciones de la naturaleza. Gracias, Sara.
ResponderEliminarY una vez más, gracias Luisa por la generosidad con que compartes tu espacio, y por la creatividad y el empuje para impulsar nuevos desafíos. Cariños.
ResponderEliminarMe comprometo (lo digo con la boca pequeña) a proponer nuevas ideas y proyectos, siempre y cuando... opinéis, colaboréis o me digáis qué os gusta o no.
ResponderEliminarGracias, Mónica, por el micro, tan bueno como siempre. Y a Valentina... sus ilustraciones tienen algo... magnético, en el sentido de que uno se queda mirándolas embobado y, no sé, el tiempo va pasando.
Gracias a las dos, gracias por acordaros de estos lunes.
Gracias a vos, y contá con nosotras. Un beso.
ResponderEliminarAquí ya tenemos los almendros en flor, no es primavera pero ya estamos atentos :)
ResponderEliminarMe gustó el juego de la ilustración, muy curiosa, ya sabéis lo que me gusta ese palabro.
Besos para las tres!
Hoy con este relato ecologico he conocido dos nuevos nombres tendré que mirar qué son flanboyanes y lapachos porque lo que sí conozco son las jacarandás en mi ciudad hay unas preciosa...
ResponderEliminarBuena aportación encantada de conocerte Mónica Brasca.
Besicos
Bellísimo como los lapachos floridos. A los flambayones no los tenía. Los ciruelos en flor son un haiku de la naturaleza.
ResponderEliminarMe ha encantado. Felicitaciones, Monica y bella ilustración de Valentina.
Cariños para todos van
Gracias, Juan Luis, Cabopá y Sandra. En realidad, a los flamboyanes en mi país, Argentina, los llamamos "chivatos" (nada poético el nombre), pero pensé que los conocerían. Son árboles bellísimos, de una copa enorme y de una flor roja muy intensa. Se dan mejor en climas cálidos, sobre todo en el Caribe. En la zona donde vivo (Santa Fe) hay que protegerlos mucho en invierno para que sobrevivan, pero hay unos cuantos, gracias a la paciencia de los dueños. Un abrazo.
ResponderEliminarSon preciosos el texto y la ilustración. Me gusta "flamboyanes", es una palabra muy sonora, me voy a buscarlo para ver cómo es.
ResponderEliminarUn abrazo a las tres
Las pequeñas cosas d elas que nos olvidamos de preocuparnos...
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