Elegimos por votación a un presidente
tridimensional, con una cierta capacidad para repetir algún que otro discurso.
Poco después nos pareció que sus palabras estaban huecas y más tarde empezó a
quedarse mudo. Hace no mucho, con cierto estupor, vimos que había perdido una
dimensión, que sólo nos era posible oírle o verle en una pantalla de plasma.
Algunos son optimistas, dicen que el
proceso es rápido e irreversible. En cuanto a los pesimistas, tan grande y
profunda es la sensación de que alguien está haciendo el ridículo que algunos
ya han empezado a reírse.
Y algunos esperamos ya el inevitable desenlace, que que vaya perdiendo las otras dos dimensiones y quede en un punto perdido ne la memoria.
ResponderEliminarUn abrazo desde el alambre.
Qué bueno Luisa, me recuerda a alguien el protagonista. Me has hecho sonreir a pesar de lo patético de la situación.
ResponderEliminarUn abrazo.
Plasmado me dejas. Un abrazo.
ResponderEliminarRisa congelada donde las haya.
ResponderEliminarUn abrazo.
Luisa, una crítica muy inteligente a la realidad política que vivimos, pues tenemos la sensación que por mucho que se empeñen, siempre se superan y meten la pata cada vez más.
ResponderEliminarAbrazos.
Muy fino tu humor, Luisa.
ResponderEliminarLa verdad es que a mí no me hace ni puta gracia. ¡Anda y que le den!
ResponderEliminarAbrazos muy indignados.
Pues casi prefería un holograma, al menos podrías desconectarlo cuando empezara a decir tonterías. Me encantó el relato!
ResponderEliminarMuy bueno, me ha encantado cómo vas haciéndole desaparecer, ojalá se haga realidad.
ResponderEliminarBesos.
Parece que no quiere estar, que nos hace el vació, ¿no?
ResponderEliminarPues eso.
Pues a mí me has dibujado una sonrisa. Me parece un micro muy inteligente, Luisa. Un relato indignado de nivel. Una narración para mentes tridimensionales... Una indignación general: pesimistas y optimistas (el pueblo entero) no creen en el resultado de la elección.
ResponderEliminarLos gobernantes han perdido credibilidad, verosimilitud (como malos personajes).
Besooos grandes
(Excelente)
¡Qué bueno, Luisa!
ResponderEliminarLo último que ha hecho el del plasma es mandar un email desde Lisboa. Es de risa si no fuera por el daño que está haciendo...
Muy bueno, mejor que bueno. Tus letras siempre llegan.
Besicos desde mi alambrada.
Lástima que nuestros dirigentes no vengan con botón On - Off y podamos apagarlos si el "programa" que nos ofrecen no es de nuestro agrado. Buen relato. Besos.
ResponderEliminarPues eso. Y un buen corte de mangas después de cortar todos los hilos que nos atan.
ResponderEliminarSaludos
Qué apaguen ya la tele, por favor!!!
ResponderEliminarBesos indignados desde el aire