Mirando la foto, simplemente con eso, a algunos les
asaltan miles de historias a la mente, historias como ésta que ahora nos cuenta
Hugo (blog: De musas y otros cuentos). ¿Quién habría imaginado
que bajo esas ramas…? Yo no, desde luego; me ha sorprendido.
“El sol, con toda su carga de vida,
se ha posado allí, tras las hojas, regalándome una vista maravillosa. La
sinfonía de verdes que se genera gracias a la luz es un espectáculo inefable.
Caído de espaldas en el pasto, trato de disfrutar estos breves instantes. El
dolor agudo en mi pecho me dice que tal vez sean los últimos.”
A veces son historias divertidas, y a veces no tanto...Gracias, Luisa.
ResponderEliminarEl final me sorprendió y... está claro que, en esa circunstancia, muy posiblemente eso es lo que se tuviera a la vista.
ResponderEliminarSi hay que irse... es una muy buena manera.
ResponderEliminarBuen micro Hugo, ¡acostumbrada me tienes!
Gracias, Rosy...si se pudiera elegir...
EliminarEl giro final, tan sorprendente como inesperado, impacta.
ResponderEliminarGracias, Pilar. La vida te da sorpresas.
EliminarTanta hermosura para un desenlace quizá....triste.....por qué?
ResponderEliminarNo tiene por qué ser triste.
EliminarBrillante, me encantó. Mis felicitaciones al autor.
ResponderEliminarSaludos...
Gracias, Juan, y bienvenido, ya vi que pasaste por mi blog. Nos leemos.
EliminarLa verdad es que te sorprende, con mucho acierto. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarGracias Hugo.
Gracias a ti por la lectura y por tu comentario!
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