31 de enero de 2014

El Área 51, otra vez







-Tanta cháchara, tanto parloteo –dijo el hombre trajeado al que llamaban Presidente-, tanta información clasificada y tanto secreto, nos hacen perder el tiempo.
-Sin embargo alimenta la imaginación de sus votantes, ellos prefieren a aquellos que tienen o parecen tener secretos, que en definitiva los guardan.
-Pero… ¡si allí no hay nada!, ¡nunca hubo nada! Fue un bulo, una broma.
-Una tras otra, es cierto.
-Las que quieras, pero sólo humo.
-Humo que aporta turismo en la zona, hoteles, restaurantes y tiendas de recuerdos. Humo que alimentó el ego de algunos de nuestros militares, que los entretuvo, si quiere. En cambio, si dice la verdad, el electorado quedará decepcionado y la zona en la que se encuentra se hundirá económicamente.
-Entonces, ¿qué propone?
-Seguir como hasta ahora.
Poco después este hombre se levantaba de la silla en la que había estado sentado, agotado, como siempre le ocurría cada vez que debía de “dominar” a un humano usando sólo las palabras y sin entrar descaradamente en su mente.

(microrrelato publicado en el nº 132 de la Revista Digital miNatura, escrito como respuesta a su convocatoria sobre el tema: “Área 51”) 

2 comentarios:

  1. Muy bueno Luisa. Enhorabuena por tu publicación. Me encantó. Saludos

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  2. Muy de otra galaxia con un final muy bueno. Eres una maga de las letras.
    Besicos muchos.

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