Durante años le vimos
reducir sus necesidades básicas. Cierto día nos anunció que empezaría a
economizar las palabras. Más tarde llegó la crisis, desde entonces nos reparte
consejos y cuentos a partes iguales.
Nosotros decimos que nos alimenta el alma.
(microrrelato envuelto para
regalo con motivo del cuarto cumpleaños de la Internacional
Microcuentista)
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