¿Qué puede haber mejor que la dulce caricia en las yemas de tus dedos de la página que pasas?
El tacto de la corteza de un árbol vivo.
¿Qué puede embriagarte más que el perfume de la tinta impresa sobre el papel?
El olor mojado de las flores de mimosa.
¿Qué mejor que una historia narrada en capítulos?
La biografía narrada por la anchura del tronco del roble.
Microrrelato escrito por Montse Aguilera (http://letrasparapasarunrato.blogspot.com/)
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi
(Si tienes un microrrelato con temática ecologista, no dudes en enviármelo. Si, por el contrario, prefieres ilustrar, ponte en contacto conmigo, esta sección la estamos construyendo entre todos y estás invitado. ¡Muchas gracias!)
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ResponderEliminarDespués de mi muerte de ayer, iba a resucitar al tercer día, pero... tenía un lunes ecologista y el micro cargado de sentimientos que podéis leer.
ResponderEliminarEn fin, que sigo viva. ¿Hay alguien ahí? Un beso a todos.
Me alegra tu resurrección, Luisa, me alegra mucho.
ResponderEliminarOr un momento creí que el relato de Montse era un alegato contra el libro y me asusté. Solo al releerlo comprendí que estaba errado.
La ilustración de Juanlu, formidable.
Enhorabuena a los tres.
Un abrazo.
Felicidades de nuevo a los tres: escritora, ilustrador y mecenas.
ResponderEliminarAbrazos.
Encantada de verte resucitada, Luisa, no podía faltar el lunes ecologista.
ResponderEliminarUn texto con mucho sentimiento y un dibujo que da imagen a esas palabras.
Besitos a los tres
Ja,ja,ja..Me alegro de tu aparición en verde, cómo no podía ser de otra manera...Yo también me autoepitafié....ja,ja,me acabo de inventar un palabro.
ResponderEliminarFelicidades a Montse, a Juanlu y a ti por esta iniciativa y por lo bien que la gente responde.
"La biografía narrada por la anchura del tronco del roble"
Preciosa esta imagen, los troncos de los árboles a veces nos hablan.
En los círculos de los troncos puede que estén contenidas todas nuestras vidas, las pasadas y las venideras, eso lo sabe cualquiera que alguna vez se haya quedado dormido -y con los ojos bien abiertos- en el medio de un bosque.
ResponderEliminarBella iniciativa, muy bien acompañada por el dibujo. Un abrazo sureño.
Juraría haber comentado este micro ayer, el espíritu de la Navidad debe haberse llevado mis impresiones a pasear por el ciberespacio. Creo que este texto describe a la perfección lo que debe sentir un escritor, o un lector que traspasa las páginas del libro que lee. El tacto de las hojas y la suave brisa que se desliza tras cada página, ese aroma que huele a aventura, que a través de la vista vivimos y que como no, siempre degustamos.
ResponderEliminarObservo, con alegría, que no solo yo he resucitado. Menos mal.
ResponderEliminarGracias y un beso