Cinta que, como adorno, llevaban las mujeres
dejándola pendiente a la espalda.
He aquí una palabra que sí que está
en el diccionario y gráfica como pocas; ya que, como posiblemente habéis podido
imaginar, la palabra pollo hace referencia a un hombre joven y
no a las gallinas. Es decir, un "siguemepollo" vendría a ser el
"follow me" que llevan los coches que guían a los aviones en los
aeropuertos, salvando algunas diferencias pero pocas.
Ejemplo:
“Vemos ahora un maravilloso vestido blanco en seda salvaje y escote palabra de
honor, con un llamativo siguemepollo granate, que no puede dejar indiferente a
nadie, ideal para eventos como… ”.
Una palabra con una etimología curiosa, como también la tiene la palabra "gilipollas". Investigala si te apetece, Luisa
ResponderEliminarNo la conocía, pero la encuentro muy divertida :-)
ResponderEliminarUn beso, Luisa.
Con todos los respetos, gilipollas voy a dejar que la investigue otro... de momento. Nunca se sabe una donde puede acabar.
ResponderEliminarYo la he escuchado hace poco, en relación con los adornos de los trajes regionales y me hizo mucha gracia.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Ostras, perdona, Luisa, no era mi intención sonar ofensivo. Mil disculpas.
ResponderEliminarQuería decir que, si te gusta la etimología, esa palabra tiene una historia muy chocante.
Perdona otra vez por la metedura de pata, el único gilipollas aquí he sido yo.
No, depropio, no me has entendido. Yo no me mosqueo ni un poco, no has de pedir perdón, ni se te ocurra.
ResponderEliminarPero eso sí, si la historia la conoces, bien podrías contármela, contárnosla o algo.
(no me ves pero... antes y ahora, sonrio con los comentarios, es dificil que me mosquee, mucho, más cuando recibo visitas como las que recibo)
Gracias, en serio, Luisa
Curiosa palabra, también a mí me agradan las etimologías.
ResponderEliminarOtra curiosidad, observo que en Argentina, en el uso diario, tenemos un idioma más acotado que los españoles. O al menos esa es mi impresión. Quizá se deba a la influencia de la inmigración: quizá mis abuelos italianos, como tantos otros y de diversas nacionalidades, sin proponérselo y en el afán de aprender rápido el castellano, redujeron el número de palabras corrientes.
Uff, todo esto para decir que "siguemepollo" me encanta.
Un abrazo, Luisa
me ha causado gracia,
ResponderEliminarsaludos
A mí también me gustan las etimologías. Y esta la desconocía.
ResponderEliminarBesos
Graciosa la palabreja.
ResponderEliminarBesitos
Una palabra interesante, Luisa, al leerla en el título pensé en ese polluelo de tuiwter, o cómo sea que se escriba, por eso lo de seguidores y seguidos...
ResponderEliminarMe ha gustado eso de siguemepollo...En fin mañana, más
Besicos.