27 de febrero de 2013

Vayamos por partes


       Sea un hombre A (siendo esta letra una representación física del mismo) y sea una mujer B (dibujada desde arriba en este caso). Sea una noche N y una hora H, en la que ambos sujetos se encuentran en el mismo restaurante R para cenar, tomar unas copas (C1, C2, C3,..) y descubrir si son conjuntos disjuntos o no.
         Hasta aquí los datos.
        Vivían el principio de una historia de amor. Él la miraba descubriendo que su corazón ya había comenzado a amarla sin esperar nada a cambio; y ella, incapaz de comer, deseaba verse saciada, correspondida y alimentarse sólo de ese sentimiento que ya empezaba a sentir por él. ¿O era un espejismo? Con delicadeza, con el roce leve de sus miradas y de sus manos, fueron haciéndose todo tipo de promesas y empezaron a buscarse, a perseguirse, a disfrutarse despacio, muy despacio.
           Hasta aquí la novela romántica.
        Reunidos A y B, mayores de edad y solteros, con la capacidad civil necesaria para contratar y obligarse, pactan que: A está interesado en la contratación de determinados servicios personales de B y B está interesada en la contratación de los mismos servicios personales de A; por lo cual, firman el presente contrato de arrendamiento en exclusividad, comprometiéndose ambas partes a desarrollar dicha labor con diligencia y atención. Sin embargo y si bien no hay un plazo fijo en la duración del presente contrato, bastará para poner fin al mismo el que cualquiera de las partes renuncie, comunicándoselo así a la parte contraria con al menos una antelación de treinta días.
           Hasta aquí el contrato de prestación de servicios.
       Contraído matrimonio, se acompaña el certificado correspondiente expedido en el Registro Civil de la ciudad correspondiente, y debidas a las desavenencias observadas a lo largo del tiempo, ambas partes presentan esta demanda de separación por mutuo acuerdo.
           Para acabar con una demanda de divorcio y cada uno por su lado.

4 comentarios:

  1. Si es que las matemáticas no dejan resquicio de duda hasta cuando la ecuación no funciona.

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  2. Teorema de las relaciones, ¡qué bueno, Luisa!

    Me parece una pieza estupenda.

    Un abrazo.

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  3. Por muchas matemática que se emplee... Lo que no funciona no tiene solución.
    Muy buena tu propuesta.
    Un abrazo

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  4. Améeeeeeenn jaa Excelente, Luisa. La has clavado al ángulo. Y no sé de qué cornos me río!! Besos van!

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