Una lágrima que recorre el fino rostro de porcelana de una de las muñecas, dos corazones cabalgando desbocados en el pecho del oso de peluche y de la pepona de trapo y el niño que, seguro de lo que ha pasado, busca con los ojos a Mister Potato.
Tanto el niño como el pequeño juguete lucen sus caras más tristes; ambos han de lidiar con el dolor de una madre sola y la traición de un padre, ambos han sido olvidados.
Y del mismo modo que el crío se escondió en su habitación huyendo de las lágrimas, lleva al juguete hasta un rincón del cuarto y le quita las orejas y los ojos para que al menos él no sufra, intentando salvarlo.
(microrrelato escrito para en Concurso en Cadena Triple C, III quincena 2012)
Luisa, estupendo ejercicio para Triple C. En esta ocasión el nivel era muy alto y con tantos participantes, era muy difícil votar.
ResponderEliminarMe gusto este micro, aunque desprenda esa tristeza de la soledad infantil.
Un abrazo.
Como dices, Triple C es un concurso complicado, muy complicado, pero... ahí estamos, jugando, escribiendo y leyendo, disfrutando en una palabra.
ResponderEliminarUn beso, Luisa.
Esta frase de inicio daba pie a demostrar todo un despliegue de sentimientos, bravo, lo has logrado Luisa. Triple C es un magnífico detonador de buenos textos.
ResponderEliminarLa inocencia del primer dolor (quizás el primero), y lastimar los sentidos para que el sufrimiento no llegue,
ResponderEliminarno sólo los niños hacen eso,
Me gustó el micro, mucho.
Hay bella poesía en su construcción.
Un abrazo.
Un texto que exuda tristeza y dolor, Luisa. De los que hacen que se te pegue ese sentimiento en la garganta por horas.
ResponderEliminarEscribir es transmitir sentimientos y tú lo logras con creces.
Un abrazo,
Lo que da de sí el Mister Potato, lo mismo sirve para las prácticas de un tirano que para demostrar la tierna actitud protectora de un niño, de por sí desprotegido. Precioso, Luisa.
ResponderEliminarUn abrazo.
PD. Esto del Triple C es una mina.
una sensibilidad tremenda, Luisa, para narrar. Touchè!
ResponderEliminarMuy triste este micro. Esta frase está dando estupendos textos.
ResponderEliminarBesitos