10 de enero de 2011

La reina


Hasta sus oídos había llegado que uno de ellos la amaba pero, ¿cómo saber cuál?, todos los peones eran iguales.

14 comentarios:

  1. Jejejeje, muy bueno, eso es lo malo de la clonación ;) Muy acertado este micro. Un abrazo.

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  2. Era el A1, seguro, es el más enamoradizo de todos.

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  3. ¿A1?
    Agua y hundido.
    También era el más llorón, imposible no reconocerle.
    Jajaja

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  4. Sigues sin tener fondo, Luisa. Fantástico.
    Lo importante es darle forma a cada idea. El microrrelato es una forma muy actual y muy cómoda para hacerlo.

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  5. Muy buena esta historia de amor sobre el tablero. Felicidades, Luisa

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  6. Qué bueno. Y menuda papeleta, tendrá que dejarse matar y el que no lo haga será, digo yo.

    ABrazos

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  7. Lo cierto es que no he pensado en la segunda parte. Pero.... puedo/podemos pensar en ello y hacer un culebrón a base de nanorrelatos ambientado en un tablero de ajedrez.

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  8. Pues yo habría pasado. A mí me gusta la singularidad y eso de que todos fueran iguales me habría quitado las ganas.

    Besos volados.

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  9. A lo mejor la reina se siente sola y pensando que alguien la ama sienta renacer la ilusión o algo.

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  10. Teniendo un Rey inválido al que defender, no se fijará en los peones.
    Muy bueno.
    Besos, Luisa.

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  11. jeje me ha encantado aunque seguro que si mira bien aprecia diferencias
    Saludillos

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  12. El brillo de los ojos, cómo se desliza por el tablero, ¿se hará el encontradizo?
    Ya se sabe que el que algo quiere..........

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  13. Luisa, por fin entro en tu casa! y me encuentro con esta joyita, y seguro que hay más ¡bien!!!

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  14. Bienvenida!!
    Estás en tu casa, hasta la cocina.

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