24 de enero de 2011

San Martín

            Deshacerse de un cadáver no es fácil, se dijo. Quizás por eso él prefirió las palizas y las amenazas.
            Ahora que su marido yacía inerte en mitad de la cocina comprendía el problema al que se enfrentaba.
            Estuvo a punto de dejarse aplastar por los gritos de años que aún retumbaban en su mente, cuando vio la sangre que empezaba a fluir por uno de sus oídos. Tenía que actuar rápido.
            Recordó entonces a Maruja, su vecina del quinto interior, ella había participado en alguna que otra matanza, ella sabría como descuartizar a un cerdo.

(microrrelato ganador en la VIII Edición del Concurso de Microrrelatos en Bubok)

10 comentarios:

  1. Lo del cerdo se ve venir desde el título, pero no deja de ser impactante el final.
    Un abrazo, Luisa. Felicidades por el blog.

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  2. Lo triste es no ver venir al cerdo por el horizonte.
    Me gustó, Luisa.
    Besos

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  3. Alberto: gracias por tu visita, encantada de verte por aquí. Cuando quieras, ya tu sabes.
    Torcuato: el problema es que de los cerdos gusta todo y eso a veces....no nubla la vista.

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  4. Divertido y real. Juegas siempre con esa doble intención. El final, como dice Alberto, no puede ser más impactante.

    Abrazos.

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  5. De cerdos está llena la Tierra. Muy buena la metáfora.

    Besos a pares.

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  6. La frase final está buscada a la perfección. Encaja como pieza de puzle jugando con los dobles sentidos. Felicidades.

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  7. En los pueblos saben tantas cosas y tan útiles todas ellas!!!
    Gracias a todos y que aproveche

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  8. Buenísimo, Luisa, me ha impactado el hilillo de la sangre. Y el doble sentido muy bueno
    Abrazos

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  9. Aplauso, beso y abrazo! Genial Luisa!
    Saludos!

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