El
mismo día que Hugo (blog: De musas y otros cuentos)
me envió el microrrelato que publiqué en la entrada anterior, descubrí en Palabras, fotos, días
un “pie de foto” que él mismo me había dejado.
Todo junto, imagen y texto, lo
reproduzco aquí y ahora.
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| fotografía de Jose Luis Rafael |
“Por detrás de la semioscuridad del
ambiente, de la frialdad de los muros, de la invitación al recogimiento del
espíritu, surge, tímidamente, el atrevimiento luminoso de los vitrales, que en
su milenaria labor de "dejar pasar la luz", aportan vida y esperanza”.
Me encanta la foto y el texto, unidos enamoran y nos sumergen en un ambiente casi mágico.
ResponderEliminarFuerte abrazo.
La foto es curiosa por ese contraste entre las espléndidas estatuas y las sillas de madera. No se si las estatuas están escondidas en una humilde iglesia, o ellas son humildes tanto como las sillas y eso las hace grandiosas, o el cura puso todo el dinero en una cosa y no le llegó a otras.
ResponderEliminarLas palabras de Hugo, en cambio, me alejan de esas historias raras que he mencionado y es como... que me ponen los pies en la tierra.
Qué cosas raras se me ocurren un domingo por la mañana, ¿verdad?
En fin, gracias por los comentarios, las historias y gracias a Hugo.
Lo curioso es la cantidad de ideas y sensaciones que se disparan a partir de una imagen y de algunas palabras. Eso es magia. Ojalá más personas visiten este lugar y se abran a ese misterio.
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