18 de abril de 2013

Pasarse de rosca


          De entre la muchedumbre enfadada salió un niño. Los hombres uniformados, ésos a los que les habían ordenado que rodeasen el Congreso, lo miraron tranquilos y curiosos. Unos metros más adelante, hecho ya un expectante silencio, el pequeño se paró, levantó un brazo y, estirando un dedo, preguntó:
-¿Es esto un corralito?
Unos pensaron que como corral, si bien estaba lleno de animales, era demasiado grande para responder a ese diminutivo. A otros les sorprendió encontrar dentro de su cabeza la siguiente pregunta: ¿por qué razón habría que dejarles salir, no habría que tratarles con la “preferencia” que se merecían?

11 comentarios:

  1. Las ideas encerradas deben encontrar la acción...

    Hay en la inocencia una muestra de otra realidad que escapa a nuestras mentes adultas :-)

    Un beso

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  2. Pues sí, se la están buscando. No obstante, ¿un niño?... creo recordar que lo denominaban "el enemigo". En fin, siempre nos queda el Alcalde de Móstoles. Un placer conocerte y charlar contigo.

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  3. Luisa, original microrrelato que abre la mollera de más de uno y que debería servir para que los que están sentados en su poltrona reaccionaran. Me temo que no será así.

    Besos.

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  4. Los niños, ellos son los que sabrán llamar a las cosas por su nombre. Como lo han hecho siempre.
    Aunque un niño con un dedo levantado, como apunta Ximens, desde su punto de vista, pueda ser y ya de hecho sea un enemigo, ¿un nenefluata?
    Por otro lado ellos no reaccionarán, pa qué. Entre ir y venir de Suiza para no sé de unos sobres, fraccionar pagos, cocinar recortes, obedecer a los alemanes, negar a su padre o vender a su madre,... están liados, están liados.
    Quisieran reaccionaran pero es que no les da tiempo y encima, ahora, con los eschaches de esos nazis de pacotilla, no pueden salir de casa.

    Voy a callarme, que me enciendo y me pierdo.

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  5. Pues sí, los deamos encerrados en el corralito (antes de que nos hagan el corralito a nosotros) y les echamos de comer aparte... Ah, bueno esto último ya lo hacen, ¿verdad?

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  6. Luisa, mejor no te respondemos a la preguntita... (es lo que tenemos los adultos, que ya estamos amaestrados)

    Un besoooo así de grande y sincero, como el de un niño.
    Amparo

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  7. No contestaremos a la pregunta Luisa, porque queda sobre-explicada, pero quisiera preguntarte algo que me ha dejado mosca al leer tu comentario en mi blog ... ese ¿"vale"? último con el que terminas tu comentario y el cual comparto... era por cabreo personal de hace tiempo, pero no porque mi micro te haya enfadado especialmente ¿verdad?. Bueno, como no he estado en casa en todo el día, pues eres la primera a la que contesto pero sólo espero que mi "micro se haya entendido y no mal-entendido".

    El tuyo, se entiende perfectamente y me sumo al encierro en el corralito ...encerrarlos, dejarlos allí... y que con lo suyo se lo coman. Los niños pondrán las palabras justas a tanto descalabro nacional, es cierto.

    Besos Luisa.

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  8. Probar de su propia medicina, eso les daría yo.

    Abrazos indignados.

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  9. Sí, con esa "preferencia! habría que tratarles. Y mucho más, Luisa que también me enciendo.

    Besitos

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  10. Dejas con tu micro indignado una pregunta abierta, está creo yo en mente de todos su ineficacia y sus malas politicas sociales, sobre todo.

    Que se queden en sus casas y sin "preferentes"

    Besicos desde mi alambrada.

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  11. La indignación me sale por los ojos y ya sólo veo tragones, ladrones y vagos dentro de ese "corralito de políticos ineptos"

    Besos desde el aire

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