Se enfada conmigo porque las noches de luna llena salgo de farra hecho unos zorros. Yo, por mi parte, la miro perplejo. ¿No me casé yo con una princesa?, ¿y dónde está?, ¿acaso me quejo?
Luisa, una cosa son los noviazgos y otra es el matrimonio. Es conviviendo cuando se va conociendo a esa persona que quieres, y puede que la prueba no se pase. El tiempo es así de puñetero.
¿Convivir antes de casarse? Pero es que a vosotros ¿no os han enseñado nada de religión como Dios manda? Pandilla de pecadores, simpáticos, pero pecadores.
Luisa, este micro me ha hecho recordar aquel chiste que me hacía mi abuelo. ¿Cuál es la direncia entre una princesa y una bruja? Cinco años de matrimonio.
Eso les pasa por no convivir antes de casarse.
ResponderEliminarNo me quiero imaginar a los suegros...
Un saludo
Lo que cambian las cosas después del matrimonio. Debería estar proscrito, si.
ResponderEliminarUn saludo.
Jajajaja, muy bueno Luisa.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Luisa, una cosa son los noviazgos y otra es el matrimonio. Es conviviendo cuando se va conociendo a esa persona que quieres, y puede que la prueba no se pase. El tiempo es así de puñetero.
ResponderEliminarBuena explicación vital de este micro.
Un abrazo grande.
¿Convivir antes de casarse? Pero es que a vosotros ¿no os han enseñado nada de religión como Dios manda? Pandilla de pecadores, simpáticos, pero pecadores.
ResponderEliminarUn beso a todos y bienvenidos a casa, Luisa
El matrimonio, como decía Groucho, es la principal causa de divorcio. Los príncipes se transforman en ranas. Y monstruos. Muy acertado.
ResponderEliminarCon el tiempo, la percepción se transforma.
ResponderEliminarRecién casados: -Cariño, me encanta ese lunar.
Después de varios años: -Con esa verruga pareces una bruja.
Un beso, Luisa.
Eso que cuentas MJ es de Gila. (y qué bueno era Gila)
ResponderEliminarjajajjja, Yo solía decir que debiera exigirse acreditar dos años de convivencia para permitir el matrimonio...
ResponderEliminarMuy bueno, Luisa!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl matrimonio hace posible las transformaciones más monstruosas. Yo no sé ahora ni quién soy, quizás una hidra... Fantástico. Un beso.
ResponderEliminar¿Qué sería de los micros sin el género fantástico, verdad?
ResponderEliminarMe sacó una sonrisa y me preocupa. Con las pocas que me quedan hoy...
zorros y princesas, je
ResponderEliminarsaludos
Jajaja, mira que eres buena Luisa. Muy divertido.
ResponderEliminarBesitos
Ah, este del zorro y la princesa ya lo he visto estos días en la tele...
ResponderEliminarMuy ingenioso, Luisa.
Luisa, este micro me ha hecho recordar aquel chiste que me hacía mi abuelo. ¿Cuál es la direncia entre una princesa y una bruja? Cinco años de matrimonio.
ResponderEliminarAgudo tu micro. Muy agudo.
Un abrazo,
Agudo pero... más chiste que micro.
ResponderEliminarY si, el tiempo resume y se lleva cualquier atisbo de fachada;
ResponderEliminarLo leí con una sonrisa, gracias.
Un abrazo.hoitu
Je, puse al final una de las palabras de verificación.
ResponderEliminar