6 de octubre de 2011

En paz

          “Son las doce horas, un minuto y quince segundos”, así es como él me hacía saber que llegaba tarde a todas nuestras citas, mientras miraba su reloj y me perdonaba la vida.
            Era una de sus manías, una de tantas, y yo era comprensiva con ellas.
          Por esa razón y sólo por él, conté en voz alta cada una de las puñaladas que le asesté, para que descansase en paz y yo con él.

(microrrelato escrito para ReC sin éxito)

13 comentarios:

  1. Madre mía Luisa, hasta donde la tendría a la pobre mujer para cometer tamaña atrocidad. El micro es muy contundente. Muy honrosa participación. Un beso.

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  2. Un final rotundo para esta historia de encuentros a deshora.

    Nada esperanzador para quienes llevan sus manías al límite del T.O.C.

    Un micro estupendo, Luisa.

    Enhorabuena.

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  3. Es que las manía, si no es que son personales,que tampoco, se llevan muy mal.

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  4. Me temo que la gota que colmaba en vaso¿número 1000? era de sangre. Un final nada pacífico para un micro sumamente impactante.

    Abrazos varios, pacíficos todos ellos.

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  5. Tanto las obsesiones como las manías llevadas al extremo son devastadoras.
    Un micro contundente, Luisa.

    Besos.

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  6. Impactante, Luisa. Tal vez demasiado negro para ReC. Me ha dejado un nudo en el estómago. Aún me impresionan este tipo de imágenes (afortunadamente). Besos.

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  7. Un pelín fuerte sí que es el micro, a veces sale así o tiene que ser así. No sé si es del gusto de ReC o de alguien, es lo que salió.
    Un beso a todos y gracias, Luisa

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  8. Luisa, menos mal que le perdonaba sus manías sino lo acaba quemando y fumándose sus cenizas. ¡Cuánto odio!
    Me gustó ese relato de REC.
    un abrazo.

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  9. el título no hace presagiar ese impactante final. Muy bueno, Luisa.

    Besitos

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  10. Él debía ser sólo un tipo raro, ella una psicópata de cuidado.
    Me gusta cuando matas Luisa.

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  11. Menudo final Luisa!!!
    Es durillo, pero muy bueno.

    Besos desde el aire

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  12. Buen micro Luisa, primero insinúas,comprensión, y cuando esperamos el beso de despedida, saca el cuchillo y degolla al angelito.
    Qué difícil es esto de REC.
    Un abrazo

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  13. Pues diría que nos muestra que hay quienes reaccionan a la crítica de modo extremo.
    Pero así es la vida, algunos hacen el matadero, y otros el moridero.

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