Y las familias se fueron haciendo más pequeñas y todos empezamos a estar más solos

Fotografía cogida del periódico El Confidencial

 

Huidas

Ayer empecé a dibujarle en el brazo un mapa de la zona haciendo hincapié en aquello en lo que tendría que fijarse para no perderse y así poder escapar sin problemas; cuando entendió lo que estaba haciendo, me regaló una sonrisa, a día de hoy la más bonita. El próximo día le haré un esquema con nuestros horarios y turnos, para que sepa cuando estoy yo, lo que realmente me interesa; imagino que volverá a sonreírme y que me gustará aunque, seamos sinceros, quiero muchas más cosas; y justo después le pintaré un corazón con nuestros nombres en los extremos de una flecha, esperando que comprenda cuáles son mis sentimientos y que yo huiré junto a ella dejando detrás, tan deprisa como pueda, este grupo terrorista que tanto me esclaviza.

Fue incapaz de gestionar la presión y... se dio la vuelta

Fotografía cogida del periódico El Confidencial

 

Interestelar

Sea porque está en mi ADN o porque tengo baja la serotonina, en este viaje por el cosmos en el que moriré, lo más importante es que la ventana de mi cuarto se convierta en un tornasol y siempre mire a esa pequeña luz, una invisible luciérnaga, que no es otra cosa que la vieja y gastada Tierra.

El cartón ha empezado a ocupar nuestro lugar, pero quizás sean los robots los que nos den la puntilla

Fotografía cogida del periódico El Confidencial