Es así, frío y distante.Un abrazo.
Si pero... un poco de calorcito sí que hay: el de las noches de verano y el de los recuerdos que calientan por dentro.Gracias por tus visitas, Alfred, las agradezco mucho. Y buenos días, siempre.
Siempre echamos algo de menos en vez de disfrutar el momento. Claro que con tanto calor...Besicos muchos.
Los extremos se tocan, o deberían. Cuando no, empiezan los problemas.Profundo y cotidiano.Un abrazo, Luisa
Gracias a todos. Seguiremos escribiendo, leyendo; buenas excusas para ver con otros ojos.
Es así, frío y distante.
ResponderEliminarUn abrazo.
Si pero... un poco de calorcito sí que hay: el de las noches de verano y el de los recuerdos que calientan por dentro.
ResponderEliminarGracias por tus visitas, Alfred, las agradezco mucho. Y buenos días, siempre.
Siempre echamos algo de menos en vez de disfrutar el momento. Claro que con tanto calor...
ResponderEliminarBesicos muchos.
Los extremos se tocan, o deberían. Cuando no, empiezan los problemas.
ResponderEliminarProfundo y cotidiano.
Un abrazo, Luisa
Gracias a todos. Seguiremos escribiendo, leyendo; buenas excusas para ver con otros ojos.
ResponderEliminar