Una vez que asumió que yo no iba a hacer nada para que
ella se independizase, me dio de lado; por mi parte, me limité a ser testigo
atónito y mudo de todos los esfuerzos que realizó para ganar el protagonismo
que tanto estaba buscando. Lo cierto es que nunca creí que lo lograría pero
hoy, a la vista de los resultados, he de admitir que ha ganado la partida, que
ha demostrado tener tesón y constancia y que para mí ya es demasiado tarde.
No ha podido dejarme atrás como quería, pero ha
logrado reemplazarme y ser ella quien dirija nuestros pasos; mientras yo,
cosida a sus pies, negra y plana, no dejo de arrastrarme a su lado.
Es lo que pasa en la vida y en todo lo que abarca. Es un juego, una partida.
ResponderEliminarBesos, Luisa
Es lo que pasa en la vida y en todo lo que abarca. Es un juego, una partida.
ResponderEliminarBesos, Luisa
La sombra toma el protagonismo :)
ResponderEliminarBesos.