29 de marzo de 2023

Se armó el belén

No lo vi venir, la verdad, pero todo empezó con el niño, con ese recién nacido que encontré en la puerta de la chabola. Nunca había visto algo tan bonito.
Fue buscando leche para alimentarle que fui a ver a Paco, el de la cabra, para pedirle consejo y ayuda; y de resultas de aquellas conversaciones acabé conociendo a Pedro, quien duerme ya junto a mí y salta de la cama tan rápido como yo cuando el bebé llora o se menea. Le encantan los niños, se ve a la legua, y a mí me gusta él, oírle cómo canta una nana o cuenta al pequeño cómo no tardando estarán jugando juntos a la pelota.
Mi vida ha cambiado totalmente en apenas unos días. Ahora somos una familia y, siendo las fechas que son, pronto vendrán los vecinos, ese trío de amigos que vive aquí al lado y que, en cuanto te despistas, se arrancan con unas rumbas, han prometido traer algo para comer y remojar la fiesta.
Fíjate tú, hasta a los animales les veo bien, el gato ha empezado a ronronear y el perro no deja de mover la cola.

3 comentarios:

  1. ¿Quién dijo que no podía ser navidad en primavera?
    SAludos.

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  2. Y que la primavera....dure y dure. Gracias por comentar.

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  3. Preciosos como siempre, Luisa. Y por supuesto, primaverí navidad!!
    Besicos muchos.

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