A las 22.00 se produjo la erupción. A las 23.00 no pudo resistir la tentación y, aun sabiendo que no debía tocarse, empezó a apretar con los dedos alrededor del grano. A las 24.00 la espinilla había dejado de serlo, era otra cosa si cabe más roja y grande. A la 01.00 comenzó a mirar las bases de maquillaje que tenía a sabiendas de que no encontraría nada. A las 02.00 decidió meterse en la cama, desesperada y sin seguir ni uno solo de los consejos que le había dado la peluquera para que el peinado le aguantase. A las 07.00, después de muchas vueltas, estaba decidida: no iría a casarse, Pedro tendría que entender que no podía aparecer un primer plano de aquello en ninguna de las redes sociales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario