2 de noviembre de 2011

Hechizo

Atrapada en un cuerpo que pesa veinte kilos más que el mío, no necesito un príncipe azul para mirarme en el espejo y verme estupenda.

13 comentarios:

  1. Si señor!! leer esto te da un empujón increíble. Y yo penando por perder 4.

    Gracias!

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  2. El "estupendo" o te lo crees o no. No tiene nada que ver con el cuerpo...
    Me ha encantado Luisa.

    Besos desde el aire

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  3. Me encanta. No nos debe importar la opinión de ningún príncipe, sólo la nuestra y siempre estamos estupendas. Un beso.

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  4. Muy buena moraleja y mensaje positivo. Me gusta mucho.

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  5. Luisa, claro que no. Son los ojos quien manda.
    Me encanta esa subida de moral.
    Un abrazo.

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  6. Esa es la filosofía, claro que sí!! Abrazos

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  7. Habrá quien además de uno mismo, aprecie más la naturalidad que vivir sin la aceptación.
    Saludos.

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  8. ¡Así se habla! ¡Sí, señora!

    Besitos

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  9. Jeje, es lo bueno de estar haciendo el amor con un hombre. La visión la pone el lector, claro

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  10. Mientras llegue a atarse los cordones de los zapatitos de cristal todo irá bien.
    Un saludo.

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  11. Cuidado con los príncipes que, a lo mejor, te miran y te convierten en sapo. No hay nada como los ojos de uno mismo.
    Besos

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