Una vez que Hansel y Gretel acabaron con la malvada bruja, la casita de chocolate salió a subasta. Creo recordar que fueron los tres cerditos quienes la adquirieron pero, como nadie la ha vuelto a ver nunca, muy posiblemente sólo la compraron y se la comieron.
¡Malditos! seguro que son los especuladores del reino de los cuentos. Buena imagen la que me haces imaginar con este cuento, jeje. Muy bien
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