23 de diciembre de 2018

HOKKU (19/07/2018)





Fuego en la acera
y el asfalto recuerda:
tiempo de siesta.



22 de diciembre de 2018

HOKKU (19/07/2018)





Lluvia de escarcha,
nevada de manoplas
y un sol tacaño.



21 de diciembre de 2018

Cuenta regresiva nº 6

49 — Amor de mesilla                                                    
Mientras los viejos duermen, sus dentaduras postizas coinciden en el mismo vaso de agua. Si bien se habían sonreído con cierta frecuencia y hasta habían acompañado a alguna frase cariñosa, nunca habían estado tan cerca.
Ahora, en silencio, se besan por primera vez, con un beso sin lengua, casto.

48 — Tiburón
Vestido de traje, armado con un móvil y una cartera, aquel frío e insaciable hombre de negocios no acababa de comprender que, cheque a cheque, dentellada a dentellada, reunión a reunión, no hacía más que atentar contra el único tiempo que le sería dado para vivir su vida.

47 — No es fácil
Por culpa de los bajos fondos y por vigilar el negocio de cerca, ocupo el puesto de concejal, viéndome obligado a vivir de día, entre horarios y conferencias de prensa. Sin embargo, intentando recuperar mi vida, hago lo que puedo porque me pillen y no lo parezca.
     
46 — Presente                                                                         
No acababa de entender la fascinación por los viajes en el tiempo, no sabía por qué cambiar el futuro yendo al pasado cuando en realidad todo era mucho más fácil: bastaba con mentir sobre ese pasado, modificar el curriculum y acceder así a un futuro mejor.

45 — Una cuestión de estética                                                           
Mientras los demás dormían la siesta, él planchaba la oreja. Hubiese preferido  poder hacerlo por las mañanas pero, aunque sólo fuese una, esta era tan grande que estirarla, plancharla y acomodarla después sobre el cráneo no era algo que pudiera hacerse dormido y con prisas.

44 — El pecado de la carne
Dejó de ser vegetariana con Eugenio, la posibilidad de estar más tiempo juntos y las circunstancias la habían llevado a hacerlo.
Desde entonces había comido carne otras veces, e incluso había aprendido a hacerla dejándola jugosa y tierna, como Ángel, que estaba realmente bueno.

43 — Desengaño
La línea del horizonte esperaba las noches más oscuras porque quería que hasta ella llegasen los guiños que le hacía el pequeño faro, esos que aún no se había atrevido a devolver.
Lo comprendió todo mejor con la primera tormenta y aquel barco.

42 — Atrapado en el tiempo
Quizás pudo haber seguido adelante, huir; sin embargo se quedó a cadena perpetua anclado en aquel momento aunque, reviviendo el instante mágico en que la tuvo en sus manos, volviese a oír el leve crujido que hizo, al quebrarse, su delicado cuello.

41 — Minifaldazo
Su madre siempre dijo que aquella que llevaba la falda por encima de la rodilla tenía los sueños cortos, y puede que tuviera razón; no mucho después se casaba con Javier, aquel muchacho de buena familia que lo era de entendederas.

40 — Segunda crónica
Comienzan a acumularse en la superficie del planeta, en realidad un asteroide, grandes arbustos de rosas nacidos de aquella con la que el Principito hablaba. Sin embargo, se siente solo y está pensando que sería buena idea iniciar otro viaje.

39 — Qué recuerdos                
La primera vez que hinqué los dientes no fui todo lo fino que me hubiese gustado, un surtidor de sangre surgió de aquel cuello y acabé sorbiendo las gotas igual que tú ahora, feliz en tu ignorancia, comes cerezas.

38 — Doble                                                     
No fui yo quien la mató, poco importa lo que hayan grabado las cámaras. En cambio recuerdo, como si fuese ahora, que mientras la sujetaba y evitaba sus patadas,  me vi venir por la calle, tan tranquilo, silbando.

37 — Zoom
Un columpio quieto en un parque vacío. Un seto. Hombres trabajando en silencio. Un cordón policial. Algunos curiosos y silencio. Una ambulancia histérica. Un muerto demasiado pequeño.
Y aún más lejos, una habitación infantil, unos padres huérfanos.

36 — Cobarde
Su sombra, otra vez, estaba golpeándole, empeñada en que por una vez reaccionase; pero él, incapaz de asumir el enfado, empezó a disimular de nuevo y a hacer como que no se daba cuenta de nada.

35 — Faena
Las listas de tareas pendientes a las que eres tan aficionada y dejas por todas partes son las que te han delatado. Por eso te he añadido una de mi propia cosecha: hacer las maletas.

34 — Soldado
Odiaba la noche, me dijo, en la que crecen los sueños sin control, dejando una almohada de pesadillas y lágrimas, y la necesidad de que algún día todo se evapore cuando llega el alba.

33 — Piratas                             
Nadie gobernaba el yate que se mecía con elegancia y suavidad sobre las olas. Dentro, empujados por ellas y desde hacía días, algunos cuerpos rodaban por la siempre antes limpia y lustrosa cubierta.

32 — Reencarnación                                                                  
Se precipitó y evaporó mil veces, fue mar, río y lágrimas. Gracias al recuerdo que aún guarda de aquellas vidas, hoy, el simple charco se atreve a fantasear. Le gustaría ser oasis.

31 — Pillado
Descubrió mi mirada recorriéndolo todo como si no lo hubiese visto nunca y me dijo: “tienes en los ojos el paisaje del primer amor y ya no vas a olvidarlo nunca”.

30 — Amor imposible        
Se conocieron en una biblioteca.
Ella estaba casada con un detective famoso, él era el jefe de una tribu sioux y, como te has podido imaginar, vivían en distintos libros.

 

29 — Paseo diario
Todos los días saco a pasear mi bolígrafo y dejó que huela las hojas en blanco; hasta que descubre ese aroma que está buscando y decide dejar su rastro.

28 — Te veo
El botones se escondió detrás de un archivador para echar una cabezada pero, en cuando se durmió, lo delató ese bocadillo lleno de zetas flotando en el aire.

27 — Niebla
Recuerdo que había un bellísimo arcoíris antes de que se me nublase la vista y le diese la última paliza, esa de la que no logra despertarse.

26 — En la playa
El horizonte se quebró y desde ese instante, desde la arena, entre impotentes y atónitos, vemos como el planeta azul ha empezado a perder el agua.

25 — Pobres
La noche de Navidad entendimos en qué nos afectaba la crisis: un hombre disfrazado de tomate entró en la chabola y se llevó nuestros zapatos.

24 — Jornada laboral
Como cada mañana la bibliotecaria colgó el cartel de “Silencio, por favor” y dio tiempo a que todos los personajes volvieran a sus casas.

23 — Deseo correspondido                                                            
No había nada que me atrajese más que su mirada clara y limpia; ese modo en que se le enturbiaba, cuando me veía.

22 — La trama
La ficción del libro me atrapó. Aquel objeto indefenso me secuestró y aún hoy no sé a quién he de pedirle rescate.

21 — Cosas de mayores            
En las noticias hablaron de un misil. No sé qué significa pero, imitando a mamá, lloro y abrazo a mi muñeca.

20 — El reloj de arena
Me dijiste: “El tiempo es claustrofóbico” y, antes de que nos diésemos cuenta, estábamos cayendo en el depósito de abajo.

19 — Una sombra
Ayer fue un mal día. Llorabas e, intentado consolarte, atravesé una pared. Comprendí entonces que el muerto era yo.

18 — Demasiada calma
Dejó de llorar por no tener chupete en cuanto apreté fuerte el cinturón; pero ahora no se mueve.

17 — Un mundo de posibilidades
Me pareció que la frase podía ser algo más, por eso la terminé con tres puntos suspensivos. 

16 — Paso del Estrecho
Nunca habría podido imaginar que acabaría persiguiendo mis sueños a bordo de un barco tan pequeño.

15 — Vida
Desde la alta torre se extiende un murmullo, un latido, que oyes hasta que mueres.

14 — La bicicleta
Una vez voló. La pedaleaba un extraterrestre cabezón de cuyo nombre no puede acordarse.

13 — También para mí
Protegí mis sueños por todos los modos a mi alcance. Los hice inalcanzables. 

12 — Incendios
Aquel verano las autoridades nos dijeron que los bosques se estaban suicidando.

11 — Sicario
Hombre que maneja la pistola como un pincel de brocha gorda.

10 — El ahorcado
Nuestro juego preferido aunque haya algunas bajas.
¿Vocal o consonante?

9 — Olvido
Nunca imaginé que la muerte no llegaría a visitarme.

8 — Huida frustrada 
Su tercer deseo fue hacerme volver a casa.

7 — Radicales
Son aquellos, los sordos de mirada sucia.

6 —Genio
Le pedí tres deseos y… nada.

5 — Tu corazón
Es un tatuaje, no late.

4 — Cuidados
Evitar limpiarlo con lágrimas.

3 — En la patera
Se sintió náufrago.

2 — ¿Amor?
No, fiebre.

1 — Explicación
Esto…

0 — Título: Buscando el emoticono adecuado

19 de diciembre de 2018

El pecado de la carne


Dejó de ser vegetariana con Eugenio, la posibilidad de estar más tiempo juntos y las circunstancias la habían llevado a hacerlo.
Desde entonces había comido carne otras veces, e incluso había aprendido a hacerla dejándola jugosa y tierna, como Ángel, que estaba realmente bueno.

17 de diciembre de 2018

Control de brillo

Era una auténtica nulidad para las relaciones personales y decidió simplificar en lo posible el problema.
Así sustituyó el mundo tridimensional que le rodeaba por la pantalla plana del ordenador que tenía en el despacho. Y no dudó en reducir los cinco sentidos para acabar usando, en el mejor de los casos, solo dos: el tacto leve de los dedos en las teclas y la vista.
En cuanto a los resultados, estos fueron proporcionales a su exposición a la realidad. No entregó jamás el corazón, sufrió la mitad y vivió poco más o menos una media vida.

16 de diciembre de 2018

HOKKU (13/07/2018)





Galopa el aire
un vivaz colibrí.
Miran las rosas.



15 de diciembre de 2018

HOKKU (13/07/2018)





El melón lucha
con la sed y el calor.
El sol protesta.



14 de diciembre de 2018

Año Nuevo, vida nueva

Sonaron los despertadores de la casa y la familia empezó a ponerse en marcha. Los turnos para las duchas y los desayunos se habían establecido previamente, todos sabían cómo vestirse poniendo especial cuidado en el calzado, incluso los más pequeños, algunos hicieron una tanda de estiramientos. No demasiado tiempo después ya estaban todos en la calle: abuelos, padres y nietos, preparados y listos para la San Silvestre Salmantina; había llegado el día y el momento con el que dejaban atrás un año lleno de hospitales infantiles, de pruebas y diagnósticos, y empezaban a vivir el Año Nuevo exactamente cómo decidieran hacerlo.
Ese fue el primer año, al que siguieron muchos otros, y tan contentos.

12 de diciembre de 2018

El día de la bestia


Para vosotros, el día del Padre.


10 de diciembre de 2018

El recorrido

Salen como las estampidas de bisontes que aparecían en las películas de indios que veía junto a su padre. Después cada uno empieza a buscar su ritmo, a concentrarse, y él lo logra, incluso su ausencia parece no hacerle ya tanto daño. Pasan el tiempo, las calles y los dorsales, y el cansancio sigue anestesiándolo. Más allá, cuando el aumento de público y los gritos de ánimo crecen, cree oírle susurrar en su oído y encuentra un resto de fuerzas en donde no había nada. Ve la meta, la cruza exhausto y se deja caer en el suelo, agotado; y llora, llora como no había podido hacer hasta ese instante, por el entrenador perdido, por el amigo, por el padre, por la promesa cumplida y también, por primera vez, se siente sonreír debajo de todas esas lágrimas.

9 de diciembre de 2018

HOKKU (13/07/2018)





Se desnudaron,
en el suelo sus trajes,
árboles y hojas.



8 de diciembre de 2018

HOKKU (11/07/2018)






Los patos cantan
en su camino al sur.
Las nubes lloran.



7 de diciembre de 2018

El Callejón de las Once Esquinas, nº 8

La revista es mágica desde la misma portada. Está creciendo en calidad, no cabe duda; este número se inicia con Jose Mª Merino como firma invitada, nada menos. También crece en cantidad, hay amigos y amigos, letras y letras, muy buenas letras. Y en mitad de todo eso estoy yo con un micro muy muy antiguo: “Otra vez”.
Mires por donde lo mires, una joyita y una alegría.
Os pongo el enlace al blog (El Callejón de las Once Esquinas), así podréis tanto leer la revista del tirón como ir relato a relato y pensaros si queréis participar en la convocatoria para el siguiente número, que ya está abierta.

5 de diciembre de 2018

Los olvidados


Era un barrio periférico de una gran ciudad, un lugar miserable hecho de papel y de lata con sillas cojas en sus puertas y pequeños jardines sin agua. En ese lugar vivían los olvidados, aquellos a los que la ciudad daba la espalda.
Un día, uno cualquiera, algo empezó a ocurrir en el mundo. Tembló la tierra, crecieron los mares, millones de insectos eclosionaron en sus huevos, las cosechas se secaron, los animales enfermaron, los hombres y mujeres sintieron miedo y temieron por el futuro de sus hijos, las aguas se contaminaron, las enfermedades infecciosas se sucedieron unas tras otras, el aire se llenó de polvo, la luna se dejó de ver y el sol pareció nublarse.
Mientras todo se reducía a arena, el barrio de los olvidados fue una vez más dejado de lado y quiso la suerte que se salvase.

3 de diciembre de 2018

Zoom

Un columpio quieto en un parque vacío. Un seto. Hombres trabajando en silencio. Un cordón policial. Algunos curiosos y silencio. Una ambulancia histérica. Un muerto demasiado pequeño.
Y aún más lejos, una habitación infantil, unos padres huérfanos.

2 de diciembre de 2018

HOKKU (11/07/2018)





Son las naranjas
atardeceres tímidos
en fríos huertos.



1 de diciembre de 2018

HOKKU (7/07/2018)






El bosque pardo
se ruboriza atónito
con la laguna.