31 de mayo de 2011

La víctima

             
           
          Un ilusionista de nuestro pueblo, de esos que hacen juegos de manos con las cartas, arrojó la idea.
            Esperábamos  detener el efecto invernadero.
            Los más exaltados afirmaban que el rendimiento de la tierra se centuplicaría.
            Según la opinión de los curas, ese pobre mago de feria como ellos lo llaman,  no tuvo responsabilidad alguna  en la catástrofe que está matándonos. Dicen que fue el diablo quien habló, valiéndose de él, para que  aconteciera el juicio final escrito en nuestro destino desde el principio de los tiempos.
            Lo cierto es que hecha la propuesta,  nadie vio un solo puño que se alzara en contra.
            —Una ráfaga de metralla —dijo.
            Y, con entusiasmo, fusilamos al sol.

Microrrelato escrito por Patricia Nasello (http://patricianasello547.blogspot.com/)
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi (http://www.dididibujos.blogspot.com/)

30 de mayo de 2011

El viejo roble

             
              El viejo roble miró con sus ojos de madera, mezcla de dolor y rabia, el negro campo de batalla. El capricho de un hombre le había costado la vida a muchos de sus hermanos. Esta vez él había sobrevivido, pero si pudiera elegir habría muerto derrumbándose sobre algún humano. Estaban diezmándolos, que ellos también sintieran el dolor de ver caer a los suyos.

Microrrelato escrito por Cybrghost (http://cybrghost.blogspot.com/)
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi (http://www.dididibujos.blogspot.com/)

29 de mayo de 2011

Guerra química


-Creo que no estamos solos –dijo ella.
Y con la siguiente respiración, su vuelo comenzó a ser errático hasta que cayeron inmóviles con las patas hacia arriba.

Microrrelato escrito por Luisa Hurtado
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi (http://www.dididibujos.blogspot.com/)

28 de mayo de 2011

Margaritas

            
             A María le gusta dormirse con un cuento. Cada noche, su madre se sienta en el borde de la cama y le relata historias increíbles.
        -En tiempos de la abuela de tu abuela, los niños jugaban en bosques y jardines donde la brisa transportaba el aroma de las flores y los rayos del sol acariciaban la piel.
         Las ranas cantaban en las charcas, los ciervos correteaban y los enamorados preguntaban a las margaritas si eran correspondidos.
            María ha escuchado tantas veces este cuento que simula tener una flor en la mano y deshoja el aire: me quiere, no me quiere, me quiere...
            -Mamá, ¿cuántas hojas tienen las margaritas?
            -Muchas, María, muchas. Cuéntalas mientras te duermes.
         La arropa y, antes de irse, la mira desde la puerta. Se está haciendo mayor. Algún día tendrá que decirle la verdad, que las flores son cuentos de abuela para entretener a los niños en este mundo gris de hormigón y cemento que un día, según cuentan, fue verde, azul, multicolor.

Microrrelatos escrito por Puck (http://losjardinesdepuck.blogspot.com/)
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi (http://www.dididibujos.blogspot.com/)

27 de mayo de 2011

La cura

            
        Se sentía cansado, llevaba mucho tiempo buscando médicos, medicinas, y soluciones para la enfermedad de su nieta, pero no había dado con nada. Como todas las enfermedades "raras" no había dinero suficiente para investigación, él sabía lo que era eso, decidir donde iban a parar los fondos públicos, elegir entre lo urgente y lo necesario, y lo que querían quienes mandaban de verdad. Pero no se sentía culpable por ello, su trabajo había sido en Medio Ambiente y no en Sanidad.
            Cuando todo estaba perdido, y la pobre criatura se debatía entre el aquí y el allá, sonó el teléfono. Era un científico, un viejo conocido, le habló de una posible cura, de las investigaciones llevadas a cabo en su laboratorio, de los progresos conseguidos. Su sonrisa se dibujó por unos momentos hasta que el viejo investigador le dijo que la medicina se hubiera podido fabricar, pero que la especie necesaria para ello se había extinguido hacía unos años.
            Conocía bien al bicho palo palmero, quebradero de cabeza durante muchos años, respiró tranquilo cuando le dijeron, hacía años, que por fin se había extinguido y ya podían construir aquél campo de golf donde habitaba.

Microrrelato escrito por Ana Vidal (http://relatosdeandarporcasa.blogspot.com)
Ilustración hecha por Juanlu/Luiyi (http://www.dididibujos.blogspot.com/)

26 de mayo de 2011

Microrrelatos ecologistas

A partir de mañana y durante unos días, este blog cederá su espacio al trabajo de un grupo de microrrelatistas y al de un ilustrador que unimos fuerzas para llamar la atención sobre la salud y los cuidados que se merece (y no recibe) nuestro planeta.
La idea partió de Anita Dinamita, uno de los autores de los que disfrutaréis, con la intención de hacer en la isla de La Palma una lectura de microrrelatos de trasfondo ecologista. Aquella idea no resultó pero, sobreponiéndose a las dificultades y con la ayuda de Juanlu/Luiyi (ilustrador y dibujante), la idea cambió, creció y las lecturas se transformaron en marcapáginas. En resumen, creo que tuvimos suerte.
A día de hoy, muchos de vosotros ya habréis visto el resultado de ese trabajo visitando los blogs de los autores pero, con su permiso, he querido darles en este blog un espacio permanente, un espacio que puede quedarse así o que puede crecer, en el que siempre serán bienvenidos todos los microrrelatos que hablen de nosotros y de nuestra relación con el mundo en que vivimos.  

25 de mayo de 2011

El reencuentro

            Para no desconocerla diré a mis ojos que busquen, bajo el peso de los años, los juegos y risas que llenaron nuestra infancia; si no es suficiente, les diré que sigan el rastro de pecas y de pelo rojo e indomable. Y aún así, si no nos encontramos, susurraré nuestra contraseña, nuestra palabra mágica, y sabré que es ella, cuando ponga un gesto de enfado por desvelarla y un segundo después, sólo uno, me reconozca, como lo que fui y nunca dejé de ser, su mejor amiga resurgiendo del pasado dispuesta a quedarse.

(microrrelato ganador en la novena quincena del año 2011 del Concurso ImaginArte Minificciones en Cadena)

22 de mayo de 2011

Una semana ya

      El pasado día 14 de mayo se celebró en Madrid una “Megaquedada de Microrrelatistas”, tras la cual todos esperamos que se produzca otra.
         Hubo de todo y todo bueno: lecturas, sorpresas, regalos, risas…; y tras ella, pequeñas y gozosas réplicas:
            -la crónica de Acuática.
            -la reflexión de Manu.
            -las fotos de Elisa.
            -la enumeración de regalos hecha por Depropio.
            -el artículo en la Internacional Microcuentista (obra de Danik Lammá) haciendo más grande aún una reunión que ya lo era.
            -la publicación en los blogs de los participantes de los micros leídos o recibidos como regalo, de las primeras impresiones y hasta de las segundas.
           Sí, hubo muchas cosas pero, por encima de todo, estuvieron las palabras, las historias, los grandes micros que nacen todos los días y que están a la distancia de un “click”, una madeja de cuentos y relatos que no cesa de crecer y que ya no va a dejar de hacerlo nunca.
            ¿Quieres enredarte en ella? Nada es más fácil.
            Entra en alguno de los blogs de los que estuvieron allí y después, poco a poco, disfrutando siempre, sin prisas, investiga los enlaces de esos blogs con otros, sigue los hilos y los nudos que les unen, busca las conexiones entre ellos construidas con buenos momentos y con buenas lecturas, usa el corazón para navegar y rema al ritmo de sus latidos.
            Ven, coge un hilo, sumérgete sin miedo en la madeja de historias que crece y se enreda y se desenreda todos los días.

21 de mayo de 2011

Una versión libre de “Lo increíble de lo increíble”


La madeja de microrrelatos en la que todos estamos enredados vuela libremente sobre las montañas en busca del lugar donde empiezan las historias.
Pasando todo tipo de necesidades, haciendo frente a las inclemencias del tiempo, por encima de vicisitudes y enfermedades, la madeja rueda y rueda buscando al dinosaurio para que, cuando despierte, encuentre a todos los microrrelatistas allí.

(Lee ahora Lo increíble de lo increíble si no lo conoces o no lo recuerdas.)

20 de mayo de 2011

Paris en los dedos

        Un día, hace tiempo, descubrimos que los dos siempre habíamos querido ir a Paris. Desde entonces hemos estado planeando nuestro viaje.
Del día de la llegada y de los días impares me he encargado yo; tú, de los pares y del día en que nos vamos.
Espero que te guste el hotelito que he buscado en el centro de la ciudad, que pinches el enlace con el que accederás a nuestra habitación y que la visión de la cama de matrimonio no te haga huir del documento que te he preparado. Después podrás elegir entre el menú del restaurante del hotel o las fresas con champán; si eliges la fruta, tu ordenador me mandará un mensaje y sabré que estás leyéndome como nunca me has leído, como nunca te he escrito, con la más suave presión de la punta de nuestros dedos sobre el teclado.

(Microrrelato que escribí y recibió Manu Espada. Espero que le gustase.)

19 de mayo de 2011

Cosa de dos

Harto de ser un segundón, el 2 adelantó al 1 en un momento de descuido. Aquel triunfo le llenó de euforia al principio pero luego descubrió la presión que conlleva ser el líder de todos los números. Las preocupaciones le hicieron adelgazar y la nariz parecía más grande en su rostro enjuto. El estrés le mantenía tenso como un palo. Miró atrás y le pareció apreciar que el 1, quizás debido a su vida relajada, redondeaba sus formas.

(Microrrelato tuneado y escrito por Pablo Garcinuño. La suerte quiso que fuese mi regalo en la megaquedada y... ¡me encanta!) 

18 de mayo de 2011

Lo increíble de lo increíble

La madeja, enredada con todo, voló libremente sobre la montaña cuando fue hacia el lugar de la historia.  Entonces sintió necesidad y quiso estornudar. ¡Atchis!
Desmelenada,  rodó hasta el dinosaurio.

(Microrrelato creado a los postres de la megaquedada, en el cual cada comensal contribuimos con una palabra. La idea fue de Manuel Ferrero, el título es obra del camarero y la palabra: “¡Atchis!”, mi humilde y genial aportación).

17 de mayo de 2011

Animales

Cuando lo vi tan asustado, casi tanto como yo, recordé todas las veces que algún animal había entrado en casa.
Me acordé del pájaro al que tuvimos que ayudar a encontrar la ventana, de la cucaracha que había sacado a mi madre de sus casillas, del gatito al que dimos leche y que luego se fue,…
Sí, me acordé de todos pero esta vez… ¡el animal era tan grande!
Llamé a mamá a gritos mientras lo vigilaba para que no se escapase. Cuando vino, vi como ella también se asustaba un poco, como parecía no estar segura de lo que tenía que hacer, hasta que la oí decir alto y claro:
-Fuera. Vete de esta casa.
Sólo eso. Y el animal empezó a moverse hacia la puerta.
¡Qué extraño! Justo antes de salir, él volvió la cabeza y dijo el nombre de mamá, muy bajito, pero yo lo oí perfectamente.

(Este es el micro que leí, o intenté leer a pesar de los nervios, en la Megaquedada de Microrrelatistas a modo de presentación; como maestro de ceremonias tuvimos a Fernando Vicente).  

13 de mayo de 2011

Por no molestar

El sueño había sido reparador, como hacía mucho tiempo que no era; por eso, quiso mantener un tiempo más los ojos cerrados y despertarse poco a poco. Oyó entonces un extraño murmullo, como si alguien rezase, y sobre él, un roce de ropas y algunas palabras.
Abrió los ojos y pudo comprobar con estupor que estaba tumbado en un cómodo ataúd, rodeado de velas, asistiendo a lo que parecía su propio entierro.
Se asustó pero, precisamente por no asustar a nadie, permaneció callado esperando un momento más apropiado.
Volvió a dormirse, acunado por los susurros, agotado en su larga lucha contra el cáncer y, cuando volvió a despertarse, ya era demasiado tarde.

(microrrelato presentado sin éxito al Concurso de Microrrelatos 5 Minutos)

12 de mayo de 2011

Con otros ojos

Siempre nos gustó salir al campo y recoger setas, siempre. Sin embargo, desde que nuestra hija empezó a acompañarnos, ya sólo las fotografiamos. Por los duendes y gnomos que viven en ellas.

(microrrelato presentado al Concurso de Micomicrorrelatos San Jorge y que, aunque no ganó, fue publicado en el blog correspondiente, bajo seudónimo, junto con otros dos por “aportar un enfoque diferente”, comentario que considero un piropo)

11 de mayo de 2011

Via Crucis

Durante el tiempo en que había durado el proceso había logrado, prueba a prueba, informe a informe, declaración a declaración, convertir una simple sospecha en una certeza, hacer entender que un pájaro muerto junto a una fábrica era un crimen contra el planeta, y ganarse la credibilidad de los periodistas y de la gente de la calle. Lo cierto era que, aunque estuviera mal decirlo antes de oír el fallo definitivo del juez, todos tenían en el acusado un culpable. Y por fin había llegado el gran día, el momento de gloria; sin embargo él estaba pendiente de otra cosa. La prensa fotografió sus ojos anegados en lágrimas pero muy pocos supieron a qué se debían: tras cinco años de dolorosa espera debido a la lluvia, podrían sacar la Virgen Morena, a su Virgen, en procesión.

(microrrelato presentado sin éxito al III Concurso de Microrrelatos sobre Abogados, mes de abril)

10 de mayo de 2011

Sociedad hipócrita

          “Desde entonces escribo”, dijo con humildad el galardonado, el cual fue inmediatamente acallado por una cerrada ovación.
El público se puso en pie, se empezaron a oír algunos vítores y sólo cuando vio que, a pesar de su extrema timidez, aquel hombre pequeño no dejaba el púlpito, la gente volvió a sentarse en sus butacas acomodando a un tiempo curiosidad y posaderas.
“Nunca he dejado de escribir como bien saben, hasta hoy, que es mi último día”.
Un murmullo creciente recorrió a la audiencia.
Todos los allí presentes sabían de la ley que imponía límites a la duración de la vida con el objeto de luchar contra la superpoblación, pero todos ellos también habían visto como no pocas personas habían logrado esquivarla alegando ser seres imprescindibles para elevar la calidad de la vida en el planeta; e incluso, no pocos de entre los presentes, con o sin méritos, esperaban poder escapar a dicha obligación que marcaba a fuego a sus congéneres.
“Hoy, cuando salga de aquí, iré por mi propio pie al crematorio, tranquilo y feliz por haber llenado mis días de palabras y de historias, feliz por haber llenado sus vidas”, dueño también del silencio y sin aparente malicia.

(microrrelato presentado sin éxito al Concurso ImaginArte Minificciones en Cadena)

9 de mayo de 2011

Lo primero es lo primero

            Besando su mejilla iba a conseguir lo primero que quería de él: decirle que iba a conquistar su piel y que debía de responder a mis caricias como sus ojos me prometían.
            Mañana, ya delante de los familiares y de los amigos, le daría el beso en la boca que le sentenciaría a muerte, por traidor.

(microrrelato presentado sin ningún éxito a la XV Edición del Concurso de Microrrelatos en Bubok)

7 de mayo de 2011

Por ti no pasan los años

Toda una vida, la de cada uno de ellos, oyendo la misma frase. Después murieron y otros vinieron a sustituirles, y después otros, y otros, y otros, en un relevo perfecto que parecía que nunca tendría fin.
            Y así era, él seguiría estando vivo.

5 de mayo de 2011

Señuelo

Siempre había puesto mucho cuidado en cómo se vestía, siempre, deseando secretamente encontrar a alguien que quisiera desnudarla el resto de las noches de su vida.

4 de mayo de 2011

Círculos

            La mujer de pelo oscuro y largo iba deprisa por la calle, no quería llegar tarde a su cita, a aquella tras la que esperaba que su vida diese un vuelco y le permitiese olvidar su miserable pasado; entonces, tropezó con él, con el hombre de los ojos azules, el mismo que aún tenía en su piel el recuerdo de la mujer delgada, aquella mujer a la que amaba, con la que esperaba algún día poder compartir su vida pero que aún estaba atada a su marido, un hombre atractivo y de mediana edad, al que ella había dejado de querer, un hombre que acababa de descubrir el desfalco cometido por su socio, ése que había sido su mejor amigo, al que había aconsejado una y otra vez que saliese del armario y que tirase por tierra el matrimonio de conveniencia que representaba, el mismo al que le estaban sometiendo a chantaje y que ahora esperaba en un café del centro, con un abultado sobre en el bolsillo interior del traje, el hombre que iba a encontrarse con una desconocida de pelo oscuro y largo, encuentro tras el cual él esperaba recuperar su vida y ella, como ya se ha dicho, olvidar su miserable pasado.

(microrrelato presentado a la II Edición del Certamen de Microrrelatos “Sant Jordi” de Radio Rubí)

2 de mayo de 2011

Tiempo de más


El médico se lo había dejado muy claro: no había cura. En un principio las malas noticias le noquearon pero, poco tiempo después, inició una actividad frenética.
Juan Granados Pérez murió el 13 de junio del 2011, al caer la tarde. Su imaginación y su blog aún vivieron cerca de un año más, lo que quizás explique su gesto tranquilo y su permanente sonrisa.

(microrrelato presentado a El Microrrelatista)

1 de mayo de 2011

Retrato-robot

-Alto. Guapo. Educado. Encantador. Inocente.