Tras haber quedado finalista del certamen Picapedreros
con “Separaciones
que no”, descubrí que el verdadero premio era poder ser articulista
de la revista La
Oca Loca (revista del centro penitenciario de Daroca) y decidir no
dejar pasar la oportunidad.
Hoy empiezo esta andadura con “Victoria”.
Seguiremos informando.
Enhorabuena por tu nuevo cometido literario. Un micro misterioso :)
ResponderEliminarBesos.
Lo que parece un relato de época esconde en realidad una incursión alienígena. Sorprende y mucho.
ResponderEliminarUn abrazo, Luisa